Celulitis: ¿Cómo luchar contra ella?
Llega el veranito y con él las piernas al aire, pero muchas mujeres prefieren cubrir sus piernas para que no se vea la temida piel de naranja. La realidad es que el 95% de las mujeres la sufrimos, por lo que es algo común y de lo que no hay que avergonzarse ni mucho menos esconder, porque es algo natural que todas tenemos.
La celulitis no entiende de tallas ni de tipos de cuerpos, pero antes de entrar en materia…
¿Qué es la celulitis?
Es una acumulación de tejido adiposo formando nódulos y hoyuelos que ocasionan el efecto popularmente conocido como piel de naranja. Las zonas más comunes donde suelen aparecer son en la nalga y en los muslos, aunque también puede aparecer en la cadera y el abdomen.
La celulitis no es una enfermedad como tal, sino una alteración estética de la superficie de la piel, que afecta entorno al 95% de las mujeres a partir de la adolescencia.
Aunque suele estar presente en zonas con exceso de tejido adiposo y con sobrepeso, la obesidad no es necesaria para que la celulitis aparezca.
¿Qué causa la celulitis?
La celulitis se forma por una sobreproducción hormonal que hace que las células adiposas dejen de funcionar correctamente. Al no realizar el drenaje correctamente, las células se inflaman, aumentan de tamaño y se vuelven duras, lo que interfiere con la circulación de líquidos. Todo esto provoca la piel de naranja y la rigidez en la zona de la piel afectada.
Algunas de las causas que pueden producir esta piel son:
- Cambios hormonales naturales en la mujer, como por ejemplo en la pubertad o en el embarazo.
- La toma de alguna hormona artificial como los estrógenos.
- Llevar una vida sedentaria.
- Una mala alimentación, con alto índice en sodio, grasas saturadas…
- Utilizar ropa excesivamente ajustada.
Cuatro fases
Grado 1: la piel de naranja aún no se observa.
Grado 2: la piel de naranja aparece al comprimir la piel.
Grado 3: la piel de naranja aparece al ponerse de pie.
Grado 4: la piel de naranja es permanente.
Además, según se muestre nuestra piel, también se pueden diferenciar distintos tipos:
- Celulitis edematosa o de componente circulatorio: está relacionada con el sobrepeso localizado principalmente en muslos y glúteos. Tiene una apariencia acolchada. Puede llegar a ser dolorosa y estar asociada a la presencia de varices. No es solo exclusiva al grupo de personas con sobrepeso, pero si su grupo mayoritario, por falta de actividad física, exceso de grasa y retención de líquidos. Además, con la aparición de la menopausia (más hormonas) aumenta este tipo de celulitis.
- Celulitis dura: también está presente en muslos y glúteos, además de estar asociada con las estrías. El grupo principal son las mujeres jóvenes. Se ve rugosa y con hoyuelos. La genética, el estrés, los cambios en el estilo de vida pueden ser factores claves para fomentarla. Las deportistas y bailarinas tienen este tipo de celulitis, que a pesar de tener la piel tersa y una buena masa muscular tienen celulitis.
- Celulitis blanca: asociada al sedentarismo. Aparece en los muslos y glúteos, pero también puede aparecer en otras zonas como la tripa, los brazos o la espalda si la persona sufre sobrepeso. No es dolorosa y está asociada a la flacidez de la piel. Tiene hoyuelos y malformaciones que aparecen a la mínima presión, además de ser muy evidente.
SPOILER: se pueden dar los tres tipos a la vez.
Los anticelulíticos SÍ que funcionan
Eso sí, siempre que haya un trabajo en equipo detrás. Los anticelulíticos ayudan, pero deben ir acompañados de una dieta equilibrada, más ejercicio físico para poder notar unos resultados óptimos. Tan solo usando el anticelulítico no notaremos nada, el trabajo en equipo es lo más importante para su reducción o eliminación.
Tipos de anticelulíticos
Antes de usar o aplicar cualquier anticelulítico tienes que mentalizarse que será una carrera de fondo, donde la constancia y el buen trabajo será la clave. Hay diferentes tipos de anticelulíticos:
- Crema
- Aceites anticelulíticos
- Gel fresco
- Cremas efecto frío – calor
- Spray
- Parches
- Diurnos y nocturnos
- Los que se usan antes de hacer ejercicio
- Vía oral
Acompáñalos siempre con un masaje drenante, ya sea por un profesional en tratamiento de cabina o un masaje manual en casa, pero es muy importante el masaje.
Puedes hacerlo sentada y con las rodillas flexionadas para llegar mejor a la zona de los tobillos, desde donde empezarás tu masaje drenante.
Ejercer con las dos manos una presión suave sobre estos, con movimientos circulares y ascendentes. Cuando llegues a la rodilla, ayúdate con los pulgares para presionar la parte interior de la misma y haz pequeños círculos. Sigue subiendo hasta la zona de la ingle, con las manos abiertas ejerce algo más de fuerza y mantén los movimientos circulares. Cuando termines mantén las piernas elevadas, lo ideal sería poder apoyarlas en la pared, ya que favorece la eliminación de las toxinas. Hazlo a diario, la constancia es muy importante.
*Si tienes varices, evítalo o reduce la presión.
También hay algunos productos como las ventosas de cristal que te ayudan a masajear la pierna, eso sí ten cuidado y evítalo hacerlo en verano, porque es posible que te queden moratones.
Gel frío y calor
La marca Rebotica tiene unos geles que son una maravilla, además como tratamiento más baratinchi te proponemos los geles del Mercadona efecto frío y calor.
Gel anticelulítico
El famosísimo por sus resultados (siempre constantes y trabajo en equipo) Somatoline Cosmetic. Y los de Celulex.
Vía Oral
Tenemos Unique Green Collagen y Thimucase.