Lo importante no es perder peso, es comer sano
La cultura de la dieta provoca estrés y ansiedad en mucha gente. Dejar de comer o evitar ciertos alimentos para perder peso no te conducirá a un estilo de vida sano. El bienestar se consigue con una alimentación saludable y consciente.
Hay que dejar de lado el viejo mito de “para estar guapa hay que sufrir”. Una dieta no debe hacerte sufrir. La delgadez no es sinónimo de salud y bienestar ni todos los cuerpos tienen que tener las medidas y peso que acostumbramos a ver en los anuncios. El verdadero bienestar está en potenciar tu autocuidado y tu salud por encima de todo. En vez de enfocarte en perder peso, enfocarte en comer sano.
No se trata de animar a la gente a que tenga sobrepeso, pero tampoco se debe hacer apología de la delgadez. Aunque los expertos afirmen que la pérdida de peso es una cuestión colateral en las dietas sanas, la delgadez sigue siendo el principal motivo por el que se recurre a ellas. El peso afecta mucho a las mujeres, las clasifica y provoca que realicen continuamente esfuerzos para perder peso y adaptarse al canon de belleza establecido por la sociedad.
Para adquirir una forma de alimentación sana, tenemos que analizar nuestros hábitos en el día a día. Si comemos lo suficiente, o pasamos hambre, por ejemplo. No se trata de vigilar solo que productos comemos, sino también todos nuestros patrones asociados a la alimentación.
El concepto de alimentación consciente implica darnos cuenta de todo lo relacionado con la cuestión alimentaria. Todos los patrones sociales y aprendidos que seguimos: que comemos, por qué lo comemos, saber que pide el cuerpo. Por otro lado, es muy importante saber que se esconde detrás de nuestras necesidades alimentarias, si pueden estar provocadas, por ejemplo, por ansiedad o estrés. Una vez que estudies todos estos aspectos, se trata de buscar la mejor fórmula para abarca la nutrición sin renunciar al placer. No hace falta prohibir alimentos, ya que eso incita a su consumo, pero cuando aprendes a comer sano ya no tienes la necesidad de comer ciertos productos y tu placer se convierte en comer cosas saludables, aunque de vez en cuando comas algo con más grasas o azúcares.
Lo principal para empezar a centrarse en la alimentación consciente es no obsesionarse con la quema de calorías, sino centrarnos en comer alimentos cuyas calorías aporten energía. Otro punto importante es no retirar de nuestra alimentación los hidratos de carbono, tal y como muchas dietas intentan, ya que estos son imprescindibles para nuestro organismo y nuestra mente.
Para iniciar un estilo de vida saludable, lo principal es no pasar hambre, lo cual genera cortisol, que nos hace acumular grasa y perder masa muscular. También es esencial evitar loa azucares refinados, que son inflamatorios e inmunodepresores. Beber suficiente agua, es algo muy importante que la gente suele pasar por alto. Por otro lado, hay que evitar las grasas trans y los productos procesados, además de fijarnos detenidamente en la composición de las etiquetas. También es bueno intentar hacer un plan para toda la semana de lo que vas a comer, para evitar improvisar con comida poco saludable. Por último, es importante comer productos frescos, naturales y de temporada y no olvidar que no pasa nada si de vez en cuando toma s algo rico en azucares o grasas