Varices y arañas vasculares: ¿cómo acabar con ellas?
Antes de ponerle tratamiento y remedio, debemos de conocer que son, como surgen y por qué. Aparte de poder crear complejos a la hora de lucir nuestras piernas, pueden llegar a ser molestas y dolorosas. Te contamos todo los trucos, tratamientos y formas de poder eliminarlas, y lo más importante cómo prevenirlas si aún estamos a tiempo.
¿Qué son?
Son venas que se han dilatado de tal forma que pueden verse en relieve sobre la piel. Estos vasos inflamados suelen verse de un tono morado o azulado, son más comunes en mujeres, por la zona de la pantorrilla, muslos y la cara interna de las piernas.
Aunque la variz es la más común, hay otros tipos de venas dilatadas como las arañas vasculares, que también aparecen de la misma forma que las varices, pero la diferencia es que son más pequeñas. También pueden darse en otras zonas del cuerpo, como el esófago, estómago, hemorroides…pueden evolucionar e incluso llegar a provocar insuficiencia venosa.
Síntomas
Pies y tobillos hinchados, pesadez y dolor en las piernas, picor en las mismas y en la zona de los tobillos, calambres y punzadas, sensación de presión, aparición de más venas superficiales, alteración del color de la piel a más oscura, enrojecimiento, sequedad…
¿Por qué aparecen?
Las varices aparecen cuando las venas no llevan de una forma correcta la sangre al corazón, ésta se acumula en ellas y es por eso por lo que se dilatan y se vuelven tortuosas.
Cuando las arterias y capilares envían la sangre rica en oxígeno del corazón al resto del cuerpo, ésta debe pasar por las válvulas venosas y regresar al corazón. A veces, las válvular deben dejar pasar la sangre y cerrarse a continuación para impedir que regresen, se debilitan y pierden la elasticidad. Esto provoca que las venas se llenen de sangre que no circula bien y se dilaten. Al dilatarse, estas venas se retuercen para ocupar su espacio normal y se producen de esta forma las varices.
Tipos de estadios
Las varices pueden presentar diferentes formas y estadios de presentación:
- Las Telangiectasias. Conocidas como arañas vasculares, son las más superficiales y finas. Pueden adoptar diferentes coloraciones, normalmente azules, violetas o incluso rojas. No suelen tener ningún síntoma más.
- Venas Reticulares. Son de diámetro medio, verdes y azulados, se transparentan a través de la piel. Pueden producir ciertas molestias, pero no suelen tener complicaciones.
- Varices Tronculares. Son las de mayor tamaño y visibles, con grandes dilataciones prominentes y sobreelevadas que se hacen más evidentes al estar de pie. Producen insuficiencia venosa y pueden provocar una tromboflebitis y a la larga favorecen la aparición de ciertos trastornos en la piel como úlceras, fibrosis y cambios de coloración.
¿Genético?
Las mujeres con antecedentes de varices e insuficiencia venosa en su familia son mucho más propensas a padecerlas. Aunque existen factores que pueden favorecer su aparición, como el embarazo, la obesidad, la menopausia, los anticonceptivos orales, la edad…
Tratamientos médicos
La Escleroterapia. Ésta última consiste en la inyección de un líquido esclerosante dentro de las varices con el fin de que acaben disolviéndose. Aunque cuando las venas son muy gruesas y están muy dilatadas estos tratamientos no tienen gran eficacia, por lo que se suele recurrir a la cirugía para tratarlas, por eso es tan importante prevenirlas y mantener las que ya hay para evitar que progresen.
La fleboextracción es la cirugía para extirpar las varices. Suele realizarse con anestesia general o raquídea, en la cual solo se duerme la mitad del cuerpo.
La ablación endovenosa de varices es la cirugía que utiliza la radiofrecuencia o el laser para cerrar las varices. Es uno de los tratamientos más conocidos por ser menos invasivo y más seguro que la propia extirpación de varices.
La clave está en los hábitos
Aunque parezca una tontería, los hábitos son fundamentales, debemos evitar tomar alimentos que provoquen retención de líquidos o dilaten las venas, como la sal, las grasas saturadas, el picante, el alcohol, el café, el tabaco, el chocolate…
Evitar el estreñimiento es fundamental, al igual que reducir la ingesta de sal, realizar duchas de agua fría en las piernas, realizar ejercicios con los pies, como caminar de puntillas, evitar el uso en exceso de tacones y más si son altos. La exposición solar influye, y el exceso de peso, usar medias de compresión o recurrir a masajes circulatorios también ayudan mucho. Además puedes ayudarte también de geles fríos, cremas y sérum que te ayudan a combatir el efecto pierna cansada como por ejemplo el Hyaluronic Energy Body Serum de Freshly Cosmetics o Tiagén piernas cansadas.