La consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López, ha señalado, tras la polémica por las declaraciones en el Congreso de la ministra de Igualdad, Irene Montero, sobre la educación sexual de los niños, que los padres "son libres para decidir la educación de sus hijos", en un contexto de normalidad, y "ningún otro, ni las instituciones, somos quien para meternos".
Así ha respondido la consejera a preguntas de los periodistas sobre este tema, antes de reunirse en Sevilla con entidades que desarrollan la Estrategia Regional Andaluza para la Cohesión e Inclusión Social (Eracis).
"No conozco el contento en las que lo ha dicho, no sé si ella ha aclarado algo al respecto, pero tal cual lo he leído, creo que ella misma se ha desautorizado para poder hablar de la protección a la infancia", ha manifestado la consejera.
Ha destacado que "hay algo muy importante", que es que "cuando uno decide ser padre es la decisión más importante que toma en su vida", y los padres "tienen obligaciones sobre los hijos, pero también tienen derechos, y creo que los padres son libres para decidir la educación de sus hijos".
Por tanto, ha continuado, "ningún otro, ni las instituciones, somos quien para meternos en la educación que un padre tiene que darle a un hijo, siempre que hablemos en un contexto de una educación normal", porque, ha matizado, cuando "hay riesgo, cuando hay cualquier problema, para eso sí estamos las instituciones".
"Cuando decides tener un hijo le dedicas toda la vida, es lo más importante; que no arrebaten el derecho a disfrutarlo, criarlo y educarlo", ha concluido la titular de Inclusión Social.
Hay que recordar que en su intervención en el Congreso este miércoles, Montero aludió a la importancia de que los menores conozcan su cuerpo y al consentimiento en las relaciones sexuales.
"Los niños, las niñas y les niñes de este país tienen derecho a conocer su propio cuerpo, a conocer que ningún adulto puede tocar su cuerpo si ellos no quieren y que eso es una forma de violencia", explicó Montero en la comisión de Igualdad en la que defendió también el derecho de los menores "a conocer que pueden amar o tener relaciones sexuales con quien les de la gana basadas, eso sí, en el consentimiento".