Mejorar la eficiencia energética y utilizar el potencial de las energías renovables constituyen herramientas de gran utilidad para reducir la pobreza energética, ya que ayudan a reducir la factura además de facilitar el acceso de los colectivos más vulnerables a unos hogares mejor aislados y más saludables.
En base a esta premisa, el director gerente de la Agencia Andaluza de la Energía, Francisco Javier Ramírez, y el presidente de Cáritas en Andalucía, Mariano Pérez de Ayala, han suscrito un protocolo de colaboración para contribuir a que las personas más desfavorecidas puedan aprovechar las ventajas que ofrecen las energías verdes y beneficiarse del ahorro que supone la eficiencia energética.
Así, entre las principales líneas de actuación del protocolo destacan el desarrollo de iniciativas conjuntas que faciliten el acceso a las energías renovables a los colectivos vulnerables, entre ellas, experiencias piloto basadas en la creación de comunidades locales de energía. Además, se promoverá la difusión de la eficiencia energética orientada a reducir el consumo energético y el gasto asociado, a través de talleres formativos, laformación de formadores y otras medidas diseñadas específicamente para estos colectivos, y se identificarán las oportunidades de inserción laboral de colectivos vulnerables en los sectores de las energías renovables y la eficiencia energética.
Este marco de colaboración surge en el seno del proyecto europeo POWERTY, que está centrado en las energías renovables para grupos vulnerables y que lidera la Agencia Andaluza de la Energía, entidad adscrita a la Consejería de Presidencia y de Hacienda y del que Cáritas forma parte del grupo de expertos. Su objetivo es facilitar a los colectivos vulnerables afectados por la pobreza energética el acceso a una energía segura, limpia y eficiente a través de las energías renovables.
En el marco de esta iniciativa se promueve el intercambio de buenas prácticas y experiencias exitosas con el resto de las regiones europeas participantes en el proyecto en diferentes ámbitos ligados a la pobreza energética, como son la identificación de nuevas tecnologías innovadoras de energías renovables orientadas a los colectivos vulnerables, nuevas fórmulas de financiación de energías limpias adecuadas para estos colectivos, mejoras en el marco regulatorio y empoderamiento de los colectivos vulnerables e innovación social para estimular la participación ciudadana de estos grupos sociales.