El sindicato Unión General de Trabajadores (UGT) de Córdoba ha lanzado u comunicado apelando por los derechos de las personas del colectivo LGTBI que dice lo siguiente:
"Ser el sindicato decano en España, con 136 años de historia, no sólo nos orienta en el nivel de responsabilidad de haber sido quiénes abrimos el camino de la lucha obrera española, sino también de la propia relación con nuestro país y su propia Historia a lo largo de todos estos años. Esto, sin duda, nos ayuda a empatizar con las víctimas de situaciones complicadas, difíciles y terriblemente nefastas, como fueron la guerra civil o la dictadura franquista, momentos en los que nuestros compañeros y compañeras ugetistas sufrieron, por el simple hecho de su defensa de la democracia y de sus convicciones ideológicas en defensa de la clase trabajadora, la persecución, la cárcel y hasta la muerte.
En estos períodos críticos, también el colectivo LGTBI sufrió las mismas consecuencias por el simple hecho de su identidad sexual o de género. La negación del derecho a ser uno mismo, a expresar y defender tus ideas y a tener una vida plena en la que la libertad personal tenga la protección del Estado es una lucha que nos pone de frente ante las amenazas de orientaciones políticas y sociales radicalizadas que parten de la negación de la diversidad hasta llegar a la negación de los derechos fundamentales y de las libertades fundamentales. Los mismos que, hoy en día, buscan cualquier oportunidad para atropellar los derechos sindicales y a los sindicatos de clase que defienden los derechos de las personas trabajadoras frente al abuso de parte del empresariado, siguen siendo los que lanzan los mensajes de odio hacia la defensa de los derechos sociales de las personas más débiles de ésta y a las personas que forman el largo abanico de la diversidad que tanto enriquece la historia, el presente y futuro de nuestro país.
Contra el fomento de los prejuicios sociales, las minorías tienen su defensa en el Código Penal que persigue los delitos de odio. Sin embargo, la siembra de estos discursos tiene sus terribles efectos en el colectivo LGTBI que aún sigue sufriendo las consecuencias de la parte más reaccionaria de la sociedad, aquella que amenaza nuestra estabilidad y los logros conseguidos en Igualdad. Aún se siguen produciendo agresiones verbales y físicas y discriminación en los ámbitos laboral, social y familiar contra este colectivo. Aún, que las personas LGTBI vivan en libertad su identidad sexual y de género sigue siendo un estigma producida por los prejuicios y que lleva a muchas personas del colectivo a vivir con miedo su propia condición, algo que, desde UGT Córdoba, condenamos sin paliativos.
Desde este sindicato apostamos por una convivencia que permita el pleno desarrollo personal de cada persona, en el que desaparezcan los prejuicios por cuestiones de género u orientación sexual; una sociedad diversa como lo es la propia humanidad, diversa en su composición pero igual en derechos. Una sociedad en la que el respeto a esa diversidad sea la normalidad y no todo lo contrario.
Los datos que corroboran que el Orgullo es necesario:
El 50 por ciento de los trabajadores LGTBI han sido agredidos verbalmente en los últimos años en sus entornos laborales.
El 86 por ciento de las personas trans han sufrido violencia verbal en dos o más, ocasiones, lo que constituye conductas de acoso transfóbico.
El 55 por ciento de las personas trans, queer o no binarias han sido rechazadas.
El desempleo de las mujeres trans mayores de 45 años supera el 80%.
El 51 por ciento de las personas LGBT+ que están fuera del armario en sus ámbitos sociales y familiares vuelven al armario en sus centros de trabajo, mientras que el 41% evitan hablar de su vida privada en el trabajo, realizando un esfuerzo de ocultación.
UGT lucha para terminar con este tipo de conductas y para que los centros de trabajo sean inclusivos y respetuosos con todas las realidades es imprescindible la educación. Pero también, desde UGT, exigimos la implantación de los planes LGTBI en las empresas de más de 50 trabajadores, el desarrollo del protocolo contra la LGTBIfobia y del protocolo de acompañamiento a personas trans, así como formación a todas las plantillas, haciendo hincapié en los departamentos de recursos humanos para evitar sesgos discriminatorios tanto en los procesos de selección como en las posibles promociones y mejoras en el centro de trabajo.
Igualmente, apostamos por el pleno desarrollo de la Ley de Empleo para facilitar el acceso a la contratación laboral de las personas que conforman el colectivo LGTBI, especialmente vulnerables, y que en la planificación de prevención de riesgos laborales se considere la LGTBIfobia como un riesgo psicosocial.
UGT va a seguir luchando día a día para conseguir el bienestar de todos y todas las trabajadoras, pero no podemos dejar pasar el Orgullo como la gran herramienta para visibilizar las problemáticas y realidades de los trabajadores y trabajadoras LGTBI, por lo que hemos conseguido, y por todo lo que nos queda por conquistar."