Analizando las trilogías de Star Wars: Parte Uno
La verdad, antes de empezar os lo tengo que decir, he mentido descaradamente con la frase anterior. Vamos a analizar películas que me gusten o que tenga ganas de analizar, no tienen por qué ser grandes éxitos del cine. He mentido porque vamos a ver, si pongo nada más empezar "vamos a analizar películas que me gustan" yo creo que muchos de vosotros dejáis de leer. A lo que sí me comprometo es que de vez en cuando haré este tipo de artículos sobre cine, porque la verdad que hablar solo de canciones o de los desvaríos que tengo cuando me aburro pues, bueno, está bien, pero me apetece hacer más cosas.
El caso es que a lo largo de este puente me ha dado por volverme a ver la saga de Star Wars entera, desde la primera película hasta la segunda, incluyendo los spin-offs. Y, aunque en un primer momento no me planteé escribir sobre ellas, me dio por meterme en Filmaffinity y las reviews de la gente me enfadaron tanto que he decidido comentar todo lo objetivamente que pueda la saga, porque mucha gente confunde la velocidad con el tocino y ponen en altares algunos episodios que son, literalmente, horribles.
En lugar de empezar según el orden de estreno de cada largometraje, en estas revisiones usaremos el orden cronológico del universo Star Wars, por lo que este primer artículo se centrará en la trilogía de Anakin Skywalker (que dicho sea de paso, está peor planeada que el final de Juego de Tronos). Así que preparad vuestras túnicas, buscad los trajes imperiales más cutres que tengáis por casa y ¡Que la Fuerza os acompañe!
Episodio I - La Amenaza Fantasma: Primera cosa que tengo que decir de este episodio: Es un completo despropósito. Y digo despropósito porque si usara las palabras que quiero usar me echarían de mi queridísimo periódico, y aunque alguno queráis eso pues yo no lo quiero, la verdad. Pero volviendo a lo que nos ocupa. Yo puedo entender que la gente se quedara maravillada con Darth Vader en su momento y quisiera conocer los orígenes del malo más malo de todos los malos, pero de ahí a hacer un biopic en tres partes pues no sé, lo veo un poco excesivo. Pero bueno, yo lo compro porque tienes un lienzo vacío y te puedes inventar cualquier cosa.
El problema fundamental es cómo comienzas la historia: es aburrida, se centra en temas y arcos que desde el principio apestan a que no van a ningún lado, y además no aporta nada al universo. Nos pasamos casi dos horas viendo a un niño que tiene potencial para ser Jedi (Anakin) danzando por ahí, junto a dos Jedis (Qui-Gon y Obi-Wan) que también van danzando por ahí y un planeta (Naboo) que está en una guerra que nos da igual. En la primera película prácticamente no se menciona a los Sith, en su lugar tenemos al pesado de Jar-Jar Binks haciendo el bobo con los típicos chascarrillos inútiles de Disney (que a Lucas también deben de encartarle). La historia de Padme no está mal, pero la verdad es que no le dan la importancia que debería tener en esta primera película. Y el único arco que es salvable es el trío de Qui-Gon, Obi-Wan y Anakin, pero claro, al primero se lo cargan en la propia película, así que tampoco termino de entender cuál era el objetivo de incluir a este personaje. Lo único bueno que tiene la película es el duelo de los Jedis con Darth Maul (pedazo de lucha) y la carrera de vainas de Tattooine (que está bien de efectos, pero no dice nada), todo lo demás es paja y movidas de Anakin con su madre que, sinceramente, no interesa. Lo dicho, un despropósito.
Episodio II - El Ataque de los Clones: La segunda entrega de la trilogía de Anakin ha sido siempre criticada muy duramente por los fans sin motivo. Para empezar, tenemos un problema: Si tú quieres hacer tres películas y en la primera ya no dices nada te quedan dos para contar la historia, por lo que tienes que condensar y, claro, ya empezamos mal. Pero aún con todo, esta película sí que nos cuenta cosas importantes: cómo surge el amor entre Anakin y Padme, por qué las Guerras Clon se llaman Guerras Clon (los clones Juan, los clones) y cuáles son las motivaciones de los separatistas que precipitan la susodicha guerra. También se nos presenta a los Sith en condiciones Y MENOS MAL, porque lo de meter a un bicho rojo y negro que es malo malísimo y que sigue a ciegas órdenes de un encapuchado pues, honestamente, no dice nada de nada. Y, finalmente, aquí vemos todo el espectáculo de efectos que hace que Star Wars sea Star Wars. Que algún listillo dirá "es que zon demaziadozzzz efectozzzz". A ver compañero, estás viendo Star Wars, no Sexo en Nueva York.
¿Qué tiene de malo esta película? Dos cosas muy simples y a la vez muy importantes: Que le falta metraje para contar bien todo lo que debe y quiere contar, y que es demasiado pastelosa. Lo primero es prácticamente irreversible por lo que he dicho al principio, así que ajo y agua. La pena es que en esta segunda entrega se podría haber profundizado muchísimo en el entrenamiento Jedi de Anakin, en su relación con Obi-Wan y con la propia Orden, y qué motiva a los Sith. En su lugar, vemos a un Anakin ya talludito que es casi un caballero, actuando solo por el universo, dominando la fuerza y partiendo gente por la mitad con la espada láser. En cuanto a lo segundo, no es que sea malo per se, pero hace que toda la tragedia se tenga que condensar en la última entrega. Solo vemos una pequeña escena en la que Anakin se vuelve loco y mata a un poblado entero, pero nada más. El resto es amor y clones y colorines y bla bla bla. No está mal, pero se podría (y debería) haber profundizado más en el conflicto y, sobre todo, en las cosas que hacen que Anakin vaya avanzando lentamente hacia el Lado Oscuro. Pero bueno, está mejor que la segunda así que al menos nos queda eso.
Episodio III - La Venganza de los Sith: Como fan de la saga tengo que decirlo: Odio a muerte está película. Y la odio porque está forzadísima, es todo tan surrealista y tan encajado a presión que es cómico como una República con tantísimos planetas se va a la m***** de una forma tan tonta. Como en las otras películas no se ha contado exactamente todo lo que se tenía que contar pues claro aquí George Lucas vio que la realidad se le echaba encima y dijo: "Solo me queda una solución: A liarla parda".
Es una auténtica pena ver como un malo tan bueno como Darth Vader, con tantísimo espacio para crearle un buen fondo, es en su juventud un llorón que no entera ni de por dónde le da el viento. Porque en esta película Anakin no se entera ni del clima, actúa como si no hubiera crecido desde la primera película y encima monta un pollo tremendo por unas visiones. Es decir, tengo que convencerme de que un chaval al que han instruido desde pequeño en la Fuerza y EL LADO OSCURO decide traicionar a todo y a todos porque ha tenido unas pesadillas y que un tío QUE SE NOTA QUE ES MALO Y QUE LE ESTÁ USANDO le cuenta tres milongas y dice: "Ah pues tienes razón, voy a matar niños jaja". Y después de que le lía con esto también tengo que asumir que cuando hace esto y se queda sin mujer, sin hijos, y hecho un zurullo con patas, su respuesta es convertirse en su perrito faldero. Pfffff, es que es tontísimo el argumento.
Que hay cosas que están bien, y no solo las luchas y los efectos. Se ve como los Jedi se tornan muy arrogantes y como los Sith les han comido la tostada, pero es que lo demás es súper estúpido. Como el hecho de que un Senado Galáctico (GALÁCTICO, TODA LA GALAXIA) decida meterse en un Imperio que los va a reprimir y SE NOTA DESDE EL PRINCIPIO porque, básicamente, "jaja suena guay eso del Imperio, dale manín". Esta película sufre tantísimo la falta de información que al final, para que enganche con el Episodio IV, necesita convertirse en un melodrama carente de argumentos para que las cosas cuadren. ¿Cuál es el problema de esto? Que al final nada encaja.
Y no hablo desde una perspectiva romántica de "buah ojalá se salvara Anakin" o algo así. Ya sabemos que el final es el Imperio, pero hubiera estado infinitamente mejor un desarrollo más natural, porque entenderíamos bien como se llega a eso y, de paso, Darth Vader quedaría como un personaje con un buen trasfondo, no como el adolescente americano que parece.
Pero bueno, a partir de aquí la saga mejora, os lo prometo (por lo menos hasta el Episodio VII). Sea como sea hasta aquí ha llegado la primera parte de este análisis a la, pese a todo, mejor saga de ciencia ficción de todos los tiempos. ¡Hasta la semana que viene!