El Vicario General de la Diócesis de Córdoba y Obispo electo de Alcalá de Henares, monseñor Antonio Prieto, ha sido recibido hoy por el Papa Francisco, acompañado por el Obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, en la Plaza de San Pedro del Vaticano, durante la Audiencia General de cada miércoles.
En este encuentro, el Papa Francisco ha trasmitido al nuevo obispo de la diócesis madrileña su afecto por Alcalá de Henares, ciudad en la que el Papa vivió seis meses y en la que completó su formación como jesuita. En la conversación, el pontífice ha compartido con el obispo electo de Alcalá su amplio conocimiento de la iglesia que le ha encomendado, y le ha pedido que atienda principalmente a los sacerdotes de su nueva diócesis, así como el ministerio de la catequesis, para lo que le ha recomendado una entrega total “como un buen pastor”.
El nuevo obispo electo de Alcalá de Henares, hasta ahora párroco in solidum de la Parroquia de “San Miguel Arcángel” de Córdoba, nació el 13 de enero de 1974 en la Rambla (Córdoba). Durante dos años, cursó estudios de Medicina y Cirugía en la Universidad de Córdoba e ingresó en el Seminario Conciliar “San Pelagio” en septiembre de 1996. Ha servido a la Iglesia de Córdoba durante 22 años, desde el 2 de julio del año 2000, cuando fue ordenado sacerdote por monseñor Javier Martínez, en la Catedral de Córdoba.