El Barcelona se enfrenta a Las Palmas con la intención de sumar una nueva victoria que le permita afianzar su reciente liderato en LaLiga. Por otro lado, la situación de los locales es muy diferente: hundidos en la clasificación y al borde de caer en puestos de descenso, solo han logrado un punto en las últimas cuatro jornadas, con tres derrotas consecutivas.
El destino parece estar de parte de Hansi Flick, quien, tras la victoria ante el Rayo la jornada pasada y el empate del Real Madrid, logró alcanzar la cima de la tabla, empatado a 51 puntos con su eterno rival. El Barcelona tiene en sus manos mantener el liderato si logra obtener otra victoria.
Aunque Las Palmas atraviesa un momento complicado y está a un solo tropiezo de caer en zona de descenso, el técnico culé dejó claro en la rueda de prensa previa al partido que no será un rival fácil.
"Son un buen equipo, ya lo demostraron aquí en el Olímpico. Es cierto que los últimos resultados no han sido favorables y también tienen varias bajas por lesión, pero saben jugar bien al fútbol", advertía el alemán.
Tal como señalaba Flick, su equipo sufrió una derrota por 1-2 y cedió el liderato, lo que puso fin a lo que el técnico de Heidelberg describió como un "noviembre de mierda". Desde ese momento, los azulgrana han logrado darle la vuelta a la situación.
El objetivo ahora es evitar cometer los mismos errores, después de haber logrado remontar en LaLiga la desventaja que tenían frente al Real Madrid y al Atlético de Madrid. Para ello, el equipo necesita gestionar bien sus recursos, teniendo en cuenta el enfrentamiento copero contra los colchoneros y el compromiso en Champions que se avecina.
Las Palmas no conoce la victoria en 2025. Los isleños no han ganado un solo partido desde el inicio del año, lo que ha provocado que pierdan el colchón de puntos que tenían y se encuentren al borde de los puestos de descenso. Si no suman ante el Barcelona este fin de semana, podrían caer en la zona roja.
Los de Diego Martínez buscan protagonizar otra sorpresa, curiosamente con el mismo árbitro que dirigió el primer encuentro entre ambos equipos, el cántabro Adrián Cordero Vega. Además, intentan hacer historia al lograr, por primera vez en sus 75 años, ganar los dos partidos de una temporada liguera al equipo catalán.
Aunque no descartan una nueva hazaña, el equipo amarillo parece estar más enfocado en su siguiente partido, una visita crucial al Real Valladolid, colista y rival directo por la permanencia.
