El gesto de Xavi con dos hinchas: Se bajó del autobús para hacerse una foto y que dejasen de llorar
El entrenador escuchó los gritos de los jóvenes aficionados entre lágrimas y bajó para hacerse una foto con ellos
El fútbol es una pasión para los aficionados, personas que cada fin de semana disfrutan, sufren, ríen y lloran por sus equipos favoritos. Esta pasión se lleva al extremo más puro cuando se trata de los niños. Esos jóvenes e ilusionados aficionados, que apoyan con el alma y con todas las fuerzas de sus pequeñas gargantas a sus ídolos del deporte de pelota.
Para muchos, conocer a alguno de sus ídolos o jugadores favoritos del club que aman es un auténtico regalo y sueño hecho realidad. Es por ello que el gesto de humildad de Xavi el pasado finde, tras ganar al Levante en el estadio Ciudad de Valencia es digno de alabar.
El entrenador culé y ex futbolista del club, volvía al autobús para acudir al hotel, tras una victoria sufrida, ante un rival duro como el Levante. A la espera de la salida del entrenador y jugadores había numerosos aficionados, que buscaban un saludo, una firma o alguna foto con sus ídolos, entre la multitud, dos pequeños chavales gritaban a Xavi desconsolados por una foto.
El entrenador culé subió al autobús tras saludar con la mano a los aficionados, sin percatarse de los gritos de los chavales. Una vez dentro, antes de partir, los jóvenes aficionados gritaban desesperados y llorando el nombre de Xavi por una foto o un pequeño momento con el técnico culé, jaleo que el conductor notificó y abrió la puerta para que dichos reclamos llegaran al entrenador.
Tras unos segundos agónicos de los pobres jóvenes hinchas, Xavi se percató del llanto de los aficionados y dejó sus mensajes del móvil a un lado, para volver a salir y pidiéndoselo a la seguridad, dejar pasar a los niños para hacerse una foto con ellos, mientras los abrazaba y consolaba: "Pero no llores campeón".
El entrenador cogió en brazos al más pequeño de los dos aficionados para la foto, mientras se contenían las lágrimas para disfrutar de un momento que no olvidarán en su vida, y un gesto que enaltece la humildad y figura del entrenador culé con sus aficionados más jóvenes y que, sin duda alguna, disfrutan como los que más del fútbol.