La jugadora de la selección española Jenni Hermoso ha presentado ante el juez de la Audiencia Nacional que instruye el 'caso Rubiales' un escrito en el que plantea la posibilidad de que se suspendan las próximas declaraciones previstas en la causa si fuese necesario para evitar de esta forma nuevas filtraciones.
Fuentes jurídicas han confirmado a Europa Press que el equipo legal de la futbolista ha pedido al titular del Juzgado Central de Instrucción Número 1, Francisco de Jorge, en un escrito que se tomen medidas para evitar nuevas filtraciones y juicios paralelos, solicitando que se depuren responsabilidades y, si fuese necesario, se paralizasen las próximas citaciones apercibiendo a las distintas partes que forman parte del procedimiento.
La representación de Hermoso se refiere a la posibilidad de suspender todas las declaraciones y no solo la suya, que todavía no tiene fecha, para tratar de salvaguardar el secreto judicial. Además, solicita que se pongan en conocimiento de la Agencia de Protección de Datos las filtraciones de las últimas semanas.
El magistrado escuchará el próximo 16 de octubre como investigado al director de la Selección, Albert Luque. Ya en noviembre, el día 2 tomará declaración al seleccionador masculino, Luis de la Fuente, al exdirector de Comunicación de la RFEF Pablo García Cuervo y al subdirector de Comunicación, Enrique Yunta.
Por último, el juez ha citado el 14 de noviembre al psicólogo de la selección femenina, Javier López Vallejo, al ex director de Gabinete de Rubiales, José María Timón, y al responsable de compliance de la selección, Javier Pujol.
Por su parte, el principal investigado en la causa, el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales, ha instado al magistrado a que trate de poner fin a las filtraciones y que se respete el secreto procesal.
ACCIONES LEGALES POR LAS FILTRACIONES
Por otro lado, el equipo legal de la futbolista ha anunciado este miércoles que emprenderá diferentes acciones con el objetivo de proteger y garantizar la intimidad de su representada después de que trascendiera a la opinión pública el vídeo de la declaración de la jugadora ante la Fiscalía del pasado 5 de septiembre, cuando formalizó la denuncia contra el expresidente por el beso que le propinó Rubiales en la entrega de trofeos del Mundial celebrado en Sidney (Australia).
En una nota de prensa emitida por su agencia de representación, TMJ, recogida por Europa Press, se apunta que la finalidad es reconducir el procedimiento penal abierto que se sigue en la Audiencia Nacional tras esta filtración a los medios --las imágenes fueron emitidas el lunes pasado por Telecinco--.
"Queremos recordar que todo procedimiento penal debe desarrollarse con garantías para preservar el derecho a la intimidad de las víctimas", indican, y señalan que si bien hasta hace unos días pensaban que este proceso ofrecía a Jenni (Hermoso) un entorno seguro, "las continuas filtraciones y la falta de dichas garantías impiden que la jugadora pueda llevar el proceso con normalidad".
Para TMJ "se han sobrepasado los límites, (...) se han vulnerado los derechos básicos de Jenni (Hermoso) y se le ha vuelto a exponer ante la opinión pública sin ningún tipo de consentimiento trasgrediendo sus derechos de protección de datos".
En este sentido, explican que los acontecimientos no solo ponen en riesgo su salud, sino que "también pone en riesgo la fiabilidad e independencia del proceso judicial" por lo que instan a los órganos competentes a tomar medidas contra los responsables de las filtraciones y a buscar soluciones para garantizar la seguridad y custodia de las informaciones de la causa durante el proceso penal.
EL JUEZ RESTRINGE EL ACCESO A AUDIOS
Cabe recordar que el juez que instruye el asunto en la Audiencia Nacional, Francisco de Jorge, ya reaccionó ante la filtración del audio de la declaración del propio Rubiales restringiendo el acceso a los mismos.
Fuentes jurídicas confirmaron el pasado 5 de octubre a Europa Press que De Jorge acordó que solo se facilitasen a las partes personadas las transcripciones de las declaraciones y no así los audios de las mismas.