Un Modric 'eterno' desatasca al Real Madrid en Balaídos ante un gran Celta
El croata salió en la segunda parte y anuló la reacción viguesa con una asistencia a Vinicius
El Real Madrid sale victorioso de Vigo ante un Celta que le puso las cosas difíciles en partido de la jornada 10 de LaLiga, jugado este sábado. Se adelantaron los blancos con un gran gol de Kylian Mbappé, empataron los locales con otro tanto de Swedberg, dominaron estos pero se llevó el gato al agua el conjunto blanco con otro tanto de Vincius aprovechando una gran asistencia de Luka Modric.
Ya son 21 partidos sin ganar del Celta ante el Madrid y nueve derrotas consecutivas en su propia casa. Los de Carlo Ancelotti igualan a puntos con el Barça (24) con un partido más. El líder juega este domingo contra el Sevilla y ambos se verán las caras la semana que viene en el primer clásico de la temporada. Antes habrá una nueva jornada de Champions League por medio.
El Madrid golpeó primero con un golazo de Mbappé, pero antes tuvo que sufrir. Ancelotti alineó al francés Tchouameni pero como central en una línea de tres junto a Militao y Rüdiger. Lucas Vázquez sustituyó al lesionado Carvajal, como era de prever, y el técnico sorprendió con la suplencia de Ferland Mendy, dando la alternativa a Fran García. Tocaban carrileros largos.
Pero poner más centrales no evitó que el Celta se plantara en dos claras ocasiones con sendos manos a mano de Swedberg ante Courtois, y en ambas ocasiones gracias a una cesión de Borja Iglesias al primer toque. En la primera el extremo sueco estaba en fuera de juego, pero en la siguiente tuvo que meter una mano salvadora el portero belga del Madrid.
Avisó después Valverde con un derechazo duro pero a las manos de Guaita. El Madrid tenía la posesión porcentualmente, pero era el conjunto local el que llevaba el 'rock and roll' a la meta visitante, como le gusta a Ancelotti. Sin embargo, lo que tienen los blancos es justo lo que le falta al Celta. En un error de Fran Beltrán en la salida, cuyo centro desvió Camavinga, aprovechó Mbappé para colocar el balón en la escuadra desde la frontal en dos toques (minuto 20).
A raíz del gol vinieron más ocasiones madridistas, las mejores en las botas de Camavinga y Vinicius, pero el partido se fue al descanso con el 0-1 en el marcador y al poco de la reanudación avisó Bellingham con un disparo raso, que cruzó en exceso.
Mingueza, suma y sigue en asistencias
Y, lo que son las cosas, lo que llegó fue el empate por obra del sueco Swedberg rematando un centro desde la derecha del internacional español Óscar Mingueza (minuto 51). Quinta asistencia en lo que va de liga del jugador formado en la cantera del Barça. Quiso hacer reaccionar al Madrid Bellingham con un robo en el centro del campo para combinar con Mbappé y este con Vinicius, que marcó a placer, pero el inglés esperó demasiado para habilitar al francés y el centro pilló a este en fuera de juego.
De haber sido válido, podría haber anulado los mejores minutos del Celta, espoleado por la grada de Balaídos que no enfriaba el ambiente ni con la lluvia. Al Madrid le costaba todo más que en la primera parte: superar la presión alta del Celta, mantener la posesión y explotar la recuperación tras pérdida que tan bien funcionó en el gol de Mbappé. Ancelotti probó con Modric y Rodrygo en lugar de Camavinga y Valverde.
La 'magia' incombustible de Modric
Ni cinco minutos tardó Modric en tirar de magia y filtrar un balón con el exterior de su pie a Vinicius para que el brasileño driblara a Guaita y le batiera por bajo (minuto 66). A sus 39 años ha batido el récord de longevidad de Puskas en el Madrid. El talento del croata no surgió por sí mismo; con los cambios, Tchouameni recuperó su posición natural y el Madrid había vuelto a una defensa de cuatro. Y ni con esas se libró de los problemas en defensa, porque el costamarfileño Bamba, sustituto de Iago Aspas en el once, volvió a poner a prueba a Courtois en un despiste de Rüdiger, que se dejó ganar la espalda. El siguiente en salir fue Mendy por Fran García, aunque fueron los centrales los que casi se 'comen' la ocasión de Mingueza, rozando la escuadra.
El técnico local, Claudio Giráldez, también movió banquillo dando entrada a Javi Rodríguez y Alfon por Manquillo y el goleador Swedberg. El partido no daba respiro y se pasaba de una zona de ataque a la contraria a un ritmo vertiginoso. Los siguientes, Douvikas por Borja Iglesias y Durán por Bamba, eran más por refresco que por reacción. En el Madrid reapareció Ceballos para dar descanso a Mbappé, reforzando el centro del campo y dejando a Vinicius solo en punta los últimos diez minutos.
El cambio logró el efecto deseado, no tanto por aminorar el empuje del Celta y recuperar el dominio para el Madrid, sino más bien por enfriar algo más el ritmo y mermar las ocasiones, pero aún tuvo una muy clara de Douvikas en el tiempo añadido, que no supo aprovechar un gran centro de Alfon desde la derecha. Una vez más sorprendiendo a la defensa del Madrid por la espalda en una contra, ahí tiene trabajo Ancelotti para la semana.