El acusado del crimen de Marta Calvo: "Yo no sabía que era la madre, pensaba que era la madame"

Marisol Burón, madre de Marta Calvo, y el padre en la Ciudad de la Justicia - ROBER SOLSONA

El jurado popular que juzga desde hace cuatro semanas a Jorge Ignacio P.J, supuesto asesino de Marta Calvo, Arliene Ramos y Lady Marcela Vargas y de intentarlo con otras ocho mujeres más en el periodo de 15 meses, ha efectuado medio centenar de preguntas al acusado tras haberle escuchado responder durante más de dos horas a su abogada defensora. Una de las cuestiones ha sido: "¿Desea dar una nueva ubicación del cuerpo de Marta Calvo?".

Jorge Ignacio ha querido responder durante la vista únicamente a las preguntas formuladas por su abogada, el jurado y la presidenta del tribunal. Se ha negado a responder a las acusaciones, tanto al ministerio fiscal como a las particulares.

Tras concluir su letrada, los miembros del jurado han efectuado alrededor de 50 preguntas, muchas de ellas relacionadas con la muerte de Marta Calvo. Así, interpelado por si deseaba dar una nueva ubicación del cuerpo de Marta, el acusado ha respondido: "¡Ay, Dios mío! Repito que no tengo ánimo de martillo. Si quisiera maquillar los hechos, hubiera contado cualquier otra cosa. Conté lo que ocurrió. Tengo que hacer justicia, contar lo que ocurrió y fue eso. Ójala hubiera hecho otra cosa. Ya lo conté con claridad".

Así mismo, se le ha interpelado por qué no manifestó a la madre de Marta, cuando se presentó en su casa dos días después de la desaparición, que la conocía. "Yo no sabía que era la madre, pensaba que era la madame donde ejercía su trabajo. Y por el nombre yo no la conocía. Había ocurrido lo que había ocurrido y no le iba a decir lo que había pasado, perdonen ustedes", ha aseverado.

Interpelado por qué tardó 21 días en entregarse pudiendo haberlo hecho antes, el acusado ha manifestado: "Es muy buena pregunta. Si hubiera sabido que no iba a ser capaz de quitarme la vida, no hubiese movido el cuerpo de la cama, hubiera llamado a la Guardia Civil y no estaría sentado aquí. Pero no puedo cambiar lo que hice. Tengo la reacción perfecta tres días después, pero ya... ¿para qué?", ha cuestionado.

En este sentido, el jurado se ha interesado por si contactó con su madre el tiempo en que estuvo escondido, a lo que ha respondido que "no". "¿Cómo?; ¿De qué manera? Jamás me comuniqué con ella. No hubo comunicación. Eso son elucubraciones de los investigadores".

Preguntado por qué tiró los restos de Marta en diferentes contenedores, el acusado ha manifestado que "el problema era cómo ponerlos en el coche sin que se movieran de un lado a otro. Es tremendamente incómodo acordarme de ello. No sabría responderlo bien pero por cuestión de practicidad", ha respondido.

En esta línea, el acusado, interpelado por lo que hizo con las sierras con las que descuartizó el cuerpo, ha indicado que no las tiró con el cadáver porque "era tan impresionante para mí saber que lo que estaba moviendo era un cuerpo humano, que lo que hice fue tirarlo en Massanassa", ha dicho.

Respecto a cómo pudo llamar a otras mujeres la mañana siguiente a la que falleció Marta Calvo, el acusado ha respondido: "Esto lo tengo que matizar. Cuando estaba con Marta decidimos que viniera otra chica con nosotros, porque nos lo estábamos pasando bien, y empezamos a escribir. Algunas respondieron y otras no y esto es lo que aparece en el registro", ha manifestado.

NOMBRES, 900 EUROS Y COCAÍNA

También se le han preguntado por otras cuestiones como por qué se identificaba con nombres falsos ante las mujeres con las que contrataba servicios sexuales, a lo que ha contestado que "es una pregunta muy genérica. De normal me presento como Jorge y ya está".

Respecto al caso de Arliene Ramos, se le ha preguntado cómo sabía que fue el último cliente de ella si dice que no sabía que estaba muerta, a lo que ha respondido que lo supo posteriormente, cuando se lo dijeron los investigadores.

Interpelado por cómo podía pagar el alquiler de dos casas, contratar servicios y vivir con 900 euros al mes que dice que ganaba trabajando, el acusado ha dicho que una de las viviendas las abonaba su madre y que, no obstante, es "bastante organizado" y tenía sus ahorros.

Respecto a si reconoce al menos en algún caso haber introducido cocaína en las partes íntimas de alguna chica, el acusado ha aseverado que "jamás". "No tiene sentido", ha apostillado.

Por último, el jurado se ha interesado por el momento en que el acusado cambió de idea y decidió no suicidarse y entregarse a la Guardia Civil: "Cambié de idea cuando ví que no me podía quitar la vida. No le había quitado la vida a Marta, así que ¿por qué me iba a quitar la mía? Al final me arrepentí cuando me iba a tirar a un camión y no pude. Era mejor aclararlo todo", ha aseverado.