El modelo de alquiler en Viena, un "ejemplo a seguir" en España
El pasado domingo, una gran manifestación en España puso de relieve la insostenible situación de los precios del alquiler, con los manifestantes señalando el sistema de Viena como un modelo a seguir. En la capital austriaca, más del 60% de la población tiene acceso a viviendas asequibles, gracias a un extenso parque de viviendas públicas que comenzó a construirse hace más de un siglo.
Este sistema se remonta a 1923, cuando las autoridades vienesas comenzaron a edificar viviendas sociales tras la I Guerra Mundial. En la actualidad, la ciudad cuenta con más de 400.000 viviendas sociales, de las cuales la mitad son de titularidad pública. En contraste, Madrid, con una población de 3,4 millones, dispone de tan solo 8.650 viviendas protegidas.
Julián Salcedo, presidente del Foro de Economistas Inmobiliarios, sostiene que "Viena es un ejemplo a seguir por su gran parque público de viviendas". Eduardo Gutiérrez, subdirector general de Provivienda, destaca la sostenibilidad y coherencia de las políticas vienesas, que han permitido que casi ocho de cada diez alquileres sean públicos o gestionados por entidades sin ánimo de lucro.
Una de las claves del éxito del sistema vienés es la alta calidad de las viviendas sociales, que fomentan la integración y evitan el estigma asociado a este tipo de inmuebles. Además, se promueve la convivencia entre personas de diferentes niveles económicos, no solo de bajos ingresos, lo que ayuda a mantener un equilibrio en el mercado.
El impacto del modelo vienés en los precios del alquiler es significativo. Según el Property Index 2024, el precio medio del alquiler en Viena es de 10,5 €/m², mientras que en ciudades españolas como Madrid y Barcelona los precios pueden alcanzar los 25,4 y 30,6 €/m², respectivamente. En comparación, el salario medio en Viena es considerablemente más alto que en Madrid, lo que permite que un vienés destine solo el 19% de sus ingresos al alquiler, frente al 55% que un madrileño debe destinar.
El modelo vienés, aunque planteado como un ejemplo viable, necesita tiempo y apoyo estatal para ser implementado en España, según los expertos. Aunque sería ideal replicarlo, la situación fiscal y el déficit público en España lo dificultan. A pesar de ello, las voces coinciden en que aumentar el parque de viviendas sociales es clave para controlar los precios del alquiler y garantizar el acceso a una vivienda digna para todos los sectores de la población.