El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 0,8% en mayo en relación al mes anterior e incrementó su tasa interanual cuatro décimas, hasta el 8,7%, debido al encarecimiento de las gasolinas, de la restauración y de los alimentos.
Estos últimos alcanzaron su mayor incremento desde enero de 1994, subiendo de manera interanual al 11% según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que confirman los avanzados a finales del mes pasado.
En el encarecimiento de los alimentos destacan el pan y cereales, queso, huevos y la carne. Pero se abaratan los precios de las legumbres y las hortalizas.
Por contra, en mayo disminuyeron los precios de los paquetes turísticos y de la electricidad y, en menor medida, del gasóleo para calefacción.