Cuando parecía que las aguas están más calmadas, Ana Obregón regresa junto a su nieta, Ana Sandra, a Madrid, a su casa de La Moraleja. Según el periodita Aureluo Manzano, “la niña ha viajado con pasaporte americano. Se supone que Ana tenía esos 3 meses para estar en EEUU y por eso vuelve”.
Además, Manzano ha desvelado que “en ningún momento se ha puesto en contacto con el Consulado, los planes son hacer los trámites en España como hija de padre español”. Y que la pequeña ha entrado en "calidad de turista".
Las palabras de Javier García Obregón, hermano de Ana, han sido de aprobación, al igual que la del resto de hermanas. Por parte de Javier ha dicho que si "Ana está feliz, yo estoy feliz". Celia y Amalia han comunicado: “Somos abuelas por tercera vez. Ana ha revivido, está feliz, y debe aprovechar esta época bonita después de toda la época horrible que hemos tenido”.