Antonio, el panadero sevillano que ofrece repartir pan puerta por puerta, como antaño, para paliar la crisis

clipping_2PujwE_4a50.jpg

Antonio, es un panadero de toda la vida de Burguillos (Sevilla) que, tras realizar el servicio obligatorio de la mili, se puso a trabajar elaborando pan. Todos los días ha vendido barras de pan, sin embargo, su negocio ha empezado a mermar desde que el pan se vende en los supermercados a un premio mucho más barato. 

Por eso, para seguir sacando su negocio adelante, mantener a sus dos hijos y la hipoteca, ha mandado una nota a sus vecinos pidiéndoles que le compren el pan a el, al pequeño negocio y no a las grandes superficies alimenticias. 

En el cartel, él escribe su situación, y la posibilidad de llevarles todos los días el pan a sus casas, dejándolo en una bolsa colgada del pomo de la puerta como se hacía antaño. 

Desgraciadamente, esta no es una nota que ha surgido de la crisis de la pandemia, sino que ya en 2013, Antonio se vio obligado a escribir esta misma nota que ahora en 2021 ha vuelto a emplear. Su situación sigue siendo la misma, viudo desde hace 17 años, con dos hijos un niño y una niña a su cargo y los gastos de la hipoteca y lo que ello conlleva. Hay un pequeño detalle que, ya cambiado y en la nota queda reflejado, la edad, cuando la redacto tenía 56 años y ahora, 64. 

Pan artesano vs pan industrial

Hace años, ser panadero en Sevilla era un oficio muy popular del que se vivía perfectamente, ahora, miles de panaderías de barrio se han convertido en invisibles debido al auge de ese alimento en los supermercados. Es mucho más barato, sin embargo, ¿es igual de sano?

Hay personas que prefieren consumir un pan que además de estar igual de bueno que el artesano sea más barato. Otras, una mínima parte hoy en día, prefieren el pan a la antigua usanza, elaborado en horno de leña y no en hornos industriales. 

No obstante, es muy fácil cambiar de opinión e invertir en pan artesano con la de ventajas que tiene como que está elaborado con alimentos naturales, masa madre, no se congela, se sirve al momento y se conserva de forma natural de 3 a 5 días.