Una de las cosas más peligrosas de verano: el contenido que subimos a redes
Muchas veces, sin darnos cuenta publicamos fotos o vídeos dando más información de la necesaria sobre nuestra actividad. Esto es una herramienta muy peligrosa que mucha gente utiliza contra nosotros mismos
Muchas personas durante sus vacaciones no pueden evitar plasmar a través de una foto o vídeo todo lo que están viendo o haciendo. Normalmente, esos contenidos suelen acabar en su redes sociales para compartir su día a día con las demás personas. Sin embargo, nunca estamos seguros de dónde o para qué van a utilizarse esas fotografías. La información que muchas veces regalamos inconscientemente, puede ser más peligrosa de lo que esperamos.
Por ejemplo, las fotografías hechas y subidas al momento revelan la ubicación de la persona en tiempo real, lo que puede dar a entender que la vivienda se encuentra vacía Esto sería un objetivo muy fácil para aquellas personas que se encargan de investigar en qué sitios sería más viable entrar sin ser descubierto. Por eso, todos los años la Policía Nacional, manda comunicados advirtiendo del peligro que tiene el uso de redes sociales hablando de estos temas
Este riesgo se incrementa si la cuenta de la persona que sube esas fotos o vídeos es pública. Con ello, permites que todas las personas que estén navegando en Internet, puedan saber todo lo que estás haciendo, incluso tu información más personal si en esas imágenes aparecen datos personales como billetes de avión, pasaporte, etc.
Un caso todavía menos impensable es la suplantación de identidad. Aunque parezca algo surrealista, una persona que tenga acceso al perfil o usuario de otra, puede compartir con todos aquellos que quiera la información que se encontraba en ese perfil. Por tanto, las imágenes o vídeos pasan a ser algo mucho más publico de lo que se espera, aunque tengamos el perfil privado o restringido a ciertas personas.
En este aspecto, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), recomienda tener controlados los aspectos de seguridad y privacidad junto con la geolocalización de la red social que se esté utilizando para poder tener un mayor conocimiento de las personas que tienen acceso a nuestra vida y evitar compartir información innecesaria sobre nosotros.
Las principales recomendaciones que dan algunos expertos son:
- Desactivar el GPS y el acceso a la localización que muchas redes sociales o aplicaciones del móvil tienen.
- Comprobar la privacidad del perfil, asegurarse de que nuestras fotos solo la puedan ver familiares y amigos y evitar aceptar solicitudes de personas que no conocemos personalmente.
- No publicar datos personales, fotos de aeropuertos o de aquellos sitios que revelan nuestra ubicación.
- Evitar las actualizaciones de los estados.
- Y en caso de tener hijos que usen redes sociales, transmitir las mismas recomendaciones.