jueves. 21.11.2024

Carlos Sánchez nació en 1962, en Pontevedra. Hace 11 años le diagnosticaron una terrible enfermedad que afectaba a su hígado cuyo pronóstico era desfavorable. Sin embargo, una segunda oportunidad llegó a su vida al recibir la ayuda de un donante anónimo. 

Una década más tarde de la mala noticia, el deportista de la Sociedad Gimnástica de Pontevedra, ha recibido la medalla de plata en lanzamiento de jabalina en el Campeonato de España Máster de Atletismo, tras haber conseguido una marca de 38,48 metros, además de conseguir el cuarto puesto en lanzamiento de peso de la categoría + 60. 

El deportista confiesa que su salvación fue algo que no se esperaba ya que, cuando llevaba nueve meses en la lista de espera de trasplantes, le llamaron para operarle pero no funcionó ya que el órgano no era válido. Finalmente, los médicos consiguieron salvarle la vida el 1 de enero de 2014, dos meses después desde la primera llamada. 

La hepatitis C es una enfermedad producida por una infección viral que produce inflamación y daño al hígado. Lo curioso es que un 80% de los casos se muestran asintomáticos, como es el caso de Carlos que hasta 12 años después no aparecieron sus síntomas. Contrajo la enfermedad a través de un corte aparentemente insignificante con una hoja de cuchilla en el año 2000 cuando se encontraba en una misión como comandante en el Ejército en Kosovo. 

Debido a la enfermedad tuvo que abandonar el Ejército pero tras el trasplante el medallista empezó a hacer vida normal, pero con una forma de ver las cosas totalmente distinta, como el mismo explica. 

Pasado los años, Carlos empezó a retomar su actividad física y se apuntó a varios campeonatos específicos para personas trasplantadas, donde consiguió sus primeras victorias. Queriendo seguir mucho más allá, participó en competiciones como el Campeonato del Mundo en Málaga y el de Europa. A partir de ese momento sus ganas de querer avanzar alimentaron su autosuperación. 

Con su gran disciplina y compromiso y con la ayuda de su amigo Santiago Ferrer, consiguió perfeccionar la técnica de lanzamiento de jabalina y de peso. 

Pero, tras esta reciente victoria, el deportista ya tiene un nuevo objetivo: el Campeonato de Europa Máster que se realizará en septiembre en Pescara (Italia). Su único obstáculo es el dinero, como bien explica, debido a la falta de ayudas. Sin embargo Carlos siente un gran orgullo ante la idea de poder representar a España en la competición. 

No solo ha encontrado una motivación en el  deporte sino que también le ha servido de apoyo en lo físico, lo emocional y  en la integración social. Además, habla de lo difícil que es superar un trasplante a todos los niveles por lo que hace referencia a DETRADI Galicia, una Asociación Gallega de Deportistas Trasplantados y en Diálisis, que informan y apoyan a los pacientes durante el proceso y después de él. 

Le dieron un año de vida y ahora es medallista en jabalina