El cuerpo de Esther López ya está en Traspinedo, donde hoy será enterrado. Cómo murió la joven, Patricia Vallés, sigue siendo una incógnita. Accidente, atropello, agresión.... todas las hipótesis sobre la muerte de Esther López siguen abiertas. Según la autopsia, la joven habría muerto por una hemorragia interna. El cuerpo de la joven presentaba varios traumatismos que le habrían provocado esa hemorragia.
Un politramautismo torácico abdominal con hemorragia interna profusa que causó un 'shock' hipovolémico”. Este tipo de shock puede se provocado por un golpe también por lo que la tesis de un accidente como un atropello no es descartada. Los traumatismos hallados en el abdomen, tórax y cabeza podrían haberse provocado de diferentes formas, por lo que, dentro de ser una muerte catalogada de etiología violenta (no fue de causa natural) se desconoce todavía si pudo ser provocada (homicida) o accidental.
Una furgoneta recorrió ayer la carretera de Traspinedo y al llegar al punto en el que encontraron el cuerpo de Esther, el vehículo hizo los simulacros con acelerones y frenadas para comprobar las posibilidades de un accidente en la zona. Los agentes investigan si la joven pudo ser atropellada. Por ello midieron trayectorias y analizaron las cámaras de tráfico comprobando los coches que pasaron por la zona la noche del 12 de enero.
Aun no se ha determinado de forma exacta la hora de la muerte, pese a que se han manejado varios intervalos de tiempo, pero tienen claro que el cadáver siempre estuvo a la intemperie. Y los cuatro forenses encargados de la autopsia han descubierto traumatismos en el abdomen y en el costado y una hemorragia interna. Ahora deben determinar si esas lesiones fueron causadas por una caída fortuita o por un golpe. Si Esther sufrió un accidente o un homicidio está por ver aún.
