De hecho, los diputados que lo deseen ya las podrán utilizar en el debate de toma en consideración de esa reforma reglamentaria, que será el único punto del Pleno del orden del día que se celebrará la semana que viene.
Fuentes parlamentarias han explicado que la traducción del catalán, el gallego y el euskera estará garantizada puesto que el Congreso contratará a los traductores que estime oportunos y que ya venían trabajando en el Senado.
Además, la institución cuenta con los auriculares necesarios para que todos los presentes en el hemiciclo puedan entender a todos los oradores que usen estas lenguas cooficiales. Eso sí, si alguno quiere utilizar el bable o el aranés deberá autotraducirse.
Con esta decisión, el PSOE y Sumar dan cumplimiento al anuncio que realizó la presidente del Congreso, Francina Armengol, en el discurso que pronunció tras su elección el pasado 17 de agosto, cuando aseguró que las lenguas cooficiales podrían utilizarse desde ese mismo momento.
El uso del catalán, el gallego y el euskera fue la condición que los grupos independentistas de ERC y Junts pusieron al PSOE para apoyar la elección de Armengol y garantizar así una mayoría progresista en la Mesa de la Cámara.