La OCU desmiente el "truco viral" para abrillantar tus cubiertos
En redes sociales recomiendan meter papel de aluminio en el lavavajillas pero es un bulo
Lo habrás visto en YouTube o en Tik Tok: meter una bola de papel de aluminio en el cestillo hace que los cubiertos salgan más limpios y sin rayones. ¿Será verdad? Pues ya te anticipamos que no, el truco de la bola es eso… una bola, aunque en el origen de este consejo había algo cierto que, poco a poco, se ha ido deformando. Pero sí te podemos contar algunos truquitos que funcionan para que tus cubiertos queden mejor.
Circulan muchos trucos y noticias por internet que tenían algún fundamento científico pero que, al rodar por las redes, se han convertido en una bola. Es como en el juego infantil del "teléfono escacharrado", en el que la transmisión produce distorsión. Y el truco del papel de aluminio para dejar los cubiertos brillantes cuando los lavas en el lavavajillas es una de tantas modas que se ha vuelto viral. Te contamos qué hay de verdad en este truco y cómo en las redes sociales se ha transformado en un bulo que OCU quiere aclarar, porque eso de la bola de papel, sin más #Nocuela.
Historia de un bulo
Es un truco antiguo, pero que, igual que otros, se reactiva de tiempo en tiempo para repetir su éxito. Reader’s Digest lo publicó en enero de 2023 en relación con la cubertería de plata, y ha seguido aparciendo en muchos medios extendiendo sus beneficios a otros utensilios y prometiendo que quedarán como nuevos.
Aluminio y plata, una combinación redonda
El papel del aluminio puede ser útil para limpiar la plata, un metal que se oscurece en contacto con el aire al forma rsulfuro de plata, que es negro.
Precisamente el truco original consistía en limpiar la plata poniéndola en contacto con papel de aluminio dentro de un recipiente con agua caliente y bicarbonato: el aluminio atrae al azufre del sulfuro de plata para formar sulfuro de aluminio, con lo que la plata queda brillante y lo que se oscurece es el papel de aluminio. La cubertería y los objetos de plata recuperan su brillo, mientras que el papel de aluminio queda oscurecido.
Pero al ir circulando por las redes este truco de limpieza se ha "manipulado": alguien decidió actualizarlo y cambió la plata por los cubiertos y el recipiente con agua, por un lavavajillas... y el resultado es una información que no es verdad, es un bulo.
Al acero inoxidable, el aluminio le resbala
El truco de la bola de aluminio no te va a funcionar con tu cubertería de diario porque probablemente tus cubiertos serán de acero inoxidable. Lo puedes comprobar mirando si llevan una marca en el reverso que indica la aleación, por ejemplo 18/10: esto indica que lleva hierro, más un 18% de cromo y un 10% de níquel.
Esta composición protege al acero de la corrosión y no produce los sulfuros de azufre de los que hablábamos, así que no hace ninguna falta poner papel de aluminio para que se limpien.
Ni bulos ni bolas: así se limpian los cubiertos
Lo que en ocasiones sí puede aparecer sobre el acero es un óxido de hierro contra el que el aluminio no tiene efecto. Lo mejor para quitarlo es usar un estropajo y frotar un poco.
Para los arañazos, el aluminio tampoco hace nada. Si son muy superficiales, basta frotarlos con el propio estropajo verde y un aceite. Si necesitan algo más de pulido, encontrarás productos específicos en el mercado o puedes recurrir a la famosa piedra blanca de limpieza, que también hemos analizado.
En conclusión, déjate de bolas que ruedan por la red y apúntate estos dos consejos redondos:
- Cuando compres cubiertos y utensilios de acero inoxidable, fíjate en que lleve marcada en el reverso cual es el tipo de aleación, prueba de que se han fabricado conforme a las normas de calidad para cada uso previsto.
- Elige el programa adecuado en el lavavajillas y usa un detergente de buena calidad.