Entre esas tareas tan poco usuales se encuentra ir a conciertos, probar helados o conocer a artistas famosos y, realizando estas tareas el sueldo puede alcanzar incluso los 1.000 euros.
De entre más de 40.000 candidatos, Paloma y Pilar fueron seleccionadas para realizar estos trabajos. El único requisito que exigían para realizarlo, era la originalidad y ser uno mismo. Además, solamente pedían enviar un vídeo de por qué deberían elegirte o una carta y demostrar que te apasiona el tema ya que realizan una selección muy exhaustiva para que la persona afortunada sea alguien que pueda aportar a ese trabajo algo personal porque realmente le apasiona.
Gracias a este tipo de trabajo, las marcas también se benefician porque llegan de una manera más cercana a los clientes y a su público.