Bella Cole podrá comer por 1ª vez en su vida gracias a un nuevo tratamiento

Bella espera poder conseguir el dinero que le ayude a vivir una vida normal.

La pequeña de cinco años tiene una rara enfermedad que la impide comer, y se está intentando recaudar dinero para que vaya a Estados Unidos.

Bella Cole, una niña de cinco años de edad, espera que un tratamiento pionero y novedoso le permita poder disfrutar de su primera comida. La pequeña padece una condición genética poco común que no le ha permitido ni probar el chocolate en toda su vida, según apuntan los medios locales. 

La familia de la niña, de Essex, Inglaterra, está intentando recaudar más de 55.000 euros a través de una campaña de crowdfunding, que se sumarían a sus propios ahorros, para llevarla a ver a un grupo de expertos en Estados Unidos. Un programa de un mes de duración enseñará a Bella cómo comer después de que su enfermedad le provocara vómitos hasta cinco veces al día. 

Bella nació con dificultades de aprendizaje y desarrollo, según sus padres. "No dejaba de vomitar la leche y lloraba. Todos me dijeron que era algo normal, pero yo sabía que algo iba mal", ha explicado la madre de la niña, Philippa, de 33 años, según informa 'Daily Star'. 

La madre de Bella Cole: "Solo verla poder comer significaría un mundo para nosotros"

Philippa y su pareja, Matthew, de 36 años, llevaron a la pequeña a un hospital local, donde los médicos detectaron que era una forma grave de reflujo ácido. Durante el primer año de su vida tuvo que ser alimentada a través de un tubo en la nariz y desde entonces a través de un "botón" en su estómago que va directo a su intestino.

"Es una niña increíble de la que estamos muy orgullosos. Todas las cosas que pensamos que ella no podría hacer, las ha hecho. Los médicos dijeron que era posible que nunca pudiera caminar o hablar, pero puede hacer ambas cosas", explicó la madre de Bella.

"Ahora está en una escuela convencional con muchos amigos", subrayó la progenitora. Se espera que Bella pase un mes en el Marcus Autism Center de Atlanta, EEUU, con fisioterapeutas, dietistas y expertos en comportamiento para ayudarla con su reflujo y enseñarle a comer.