Chris Hipkins se convierte en el nuevo primer ministro de Nueva Zelanda

Chris Hipkins ha jurado este miércoles como nuevo primer ministro de Nueva Zelanda, completando formalmente el traspaso del poder de Jacinda Ardern, que ha presentado su dimisión de manera oficial momentos antes.

Después de aceptar la renuncia de la ahora ex primera ministra, la gobernadora general, Dame Cindy ha celebrado una ceremonia para nombrar a Chris Hipkins como nuevo mandatario del país y a Hon Carmel Sepuloni como la nueva viceprimera ministra.

En la ceremonia, Hipkins también ha sido nombrado como ministro de Seguridad Nacional e Inteligencia, según ha detallado en un comunicado la oficina de la gobernadora general.

El nuevo mandatario neozelandés ha descrito el cargo como "la mayor responsabilidad" de su vida durante la ceremonia de investidura, que se ha celebrado en la Casa de Gobierno, según ha recogido 'NZ Herald'.

La ceremonia ha tenido lugar momentos después de que Jacinda Ardern haya renunciado de manera oficial como primera ministra de Nueva Zelanda, cuando ha presentado su dimisión a la gobernadora general del país.

Tras ello, ha salido por última vez de la Casa del Gobierno de Nueva Zelanda, donde ha sido recibida por una multitud de personas que le esperaban fuera, como ministros de su gabinete, parlamentarios, personal y espectadores, a quienes ha saludado emotivamente.

La semana pasada, la ahora ex primera ministra anunció por sorpresa su renuncia a liderar el país y el Partido Laborista, reconociendo no contar ya con las fuerzas necesarias para llevar a cabo tales empresas. Se convirtió en la primera ministra más joven del mundo al ser elegida a los 37 años en 2017.

Bajo su mandato lidió con el tiroteo de la mezquita de Christchurch, en el que murieron 15 personas y medio centenar resultaron heridas, y tras su reelección guió a Nueva Zelanda a través de la pandemia, logrando ser uno de los primeros países libres de casos de coronavirus, mientras el resto del mundo permanecía encerrado.

Ahora tiene el reto de revivir la caída de popularidad de su partido ante de las elecciones generales, que tendrán lugar el próximo mes de octubre.