Que te toque la lotería es un hecho magnífico en la vida, que puede solucionar los problemas de las personas, llevándoles a tener gran cantidad de dinero en pocos instantes, pero se trata de un hecho que solo pocos tienen el placer de conseguir, pues se trata de un hecho único e irrepetible...o tal vez no.
Jerry y Marge Selbee eran una pareja de ancianos con seis hijos en total, que trabajaba en una tienda de disfraces de fiesta, en la ciudad estadounidense de Michigan, Estados Unidos. La vida de estos enternecedores ancianos daría un vuelco tras su jubilación ya que, consiguieron descifrar el método para ganar la lotería y así conseguir millones de dólares durante 9 años.
Este curioso hecho comenzó en 2003, cuando Jerry se encontraba hablando con los nuevos propietarios de su local de disfraces, cuando vio un número de la lotería de Michigan, llamada Winfall, ejemplar el cual observó durante tres minutos. Esos 180 segundos dieron para mucho en la mente del jubilado Jerry que, descubrió una laguna matemática dentro del boleto, según explicó el mismo en una entrevista para el Battle Creek Enquirer de 2018.
En ese momento, Jerry descubrió el método que le haría ganar millones de dólares durante nueve años. El juego de lotería consistía en adivinar los seis números seleccionados para conseguir el mayor premio. Si ninguno de los participantes acertaba el número en cuestión, el premio se repartía entre los participantes que habían adivinado entre 2 y 5 números de los seleccionados.
Este último factor sin ganadores fue el que Jerry aprovechó para lucrarse ya que, aprovechaba cuando no había ganador y este compraba miles de boletos sabiendo que esto le llevaría a más coincidencias (con un dólar por boleto comprado). De esta manera, la pareja consiguió hacerse con más de 25 millones de euros en solo 9 años.
La curiosa e interesante historia de esta pareja de ancianos llegará a la pantalla grande de los cines el próximo 15 de junio, en el Festival de Cine de Tribeca: 'Jerry and Marge Go Large', protagonizada por Bryan Cranston y Annette Bening.
