La situación en Ucrania continúa incrementando ante las amenazas nucleares de Vladimír Putin, declaraciones que Zelenski no cree que se materialicen al estar convencido de que Putin quiere ahogar a Ucrania en sangre. Por esta razón, Estados Unidos ha emitido una alerta por la que piden a todos sus ciudadanos a que abandonen Rusia de inmediato.
Este preocupante aviso llega en el momento de pleno colapso en Moscú de los vuelos comerciales, debido a que una multitud de personas buscan abandonar el país después de que se anunciara la movilización parcial militar, evitando tener que acudir al frente de guerra. Ante esto, el Gobierno ruso ha advertido que se está haciendo una lista de todos los que se marchan, intentando a que más de uno piense dos veces el dejar Rusia.
“Si quieres salir de Rusia debes realizar los preparativos necesarios lo antes posible. La embajada de Estados Unidos se encuentra muy limitada a la hora de ofrecer asistencia a los estadounidenses y las condiciones podrían verse cada vez más limitadas”
Además, se explica que las rutas terrestres siguen abiertas y añaden que el Gobierno ruso podría “empezar a negar la doble nacionalidad a los estadounidenses y el acceso a la asistencia consular para evitar su salida del país”, dando cuenta de la gravedad de la situación. Inclusive apuntan en el aviso que los norteamericanos con doble nacionalidad, también con pasaporte ruso, podrán ser llamados a filas.
El gas como “arma de guerra”: la OTAN habla de sabotajes en Nord Stream
Vladímir Putin próximamente anunciara la anexión de territorios prorrusos tras la organización de referéndums en las regiones de Donestk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia, según apuntan los servicios de inteligencia de distintos países de la OTAN. Estos referéndums no están reconocidos por la Alianza, de la cual España forma parte.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ha dejado claro que España “no concede ninguna credibilidad ni legitimidad a los resultados ficticios anunciados por las fuerzas de ocupación”.
Rusia continúa incrementando la presión sobre una Europa sumida en una crisis energética derivada del uso del gas como “arma de guerra”. Tanto la UE como la OTAN apuntan a que hay un sabotaje detrás de las fugas de los gasoductos Nord Stream que cruzan el Báltico. Debido a esto, la Comisión Europea va a reforzar la seguridad en todas sus infraestructuras críticas mientras se determina quién lo ha hecho, pero ya Polonia y Ucrania acusan directamente a Rusia.
La primera fuga fue detectada en Dinamarca en uno de los tramos del Nord Stream 2 en la isla Bronholm. Horas más tarde se detectó una caída en la presión del gas en el gasoducto submarino Nord Stream 1, el cual procede de Rusia hacia Alemania y se vieron afectadas las dos líneas del conducto.
La Unión Europea considera que toda la información que manejan indica que “las fugas son resultado de un acto deliberado”, por lo que se comprometen con cualquier investigación que aclare lo sucedido.
