jueves. 21.11.2024

El balance provisional de víctimas mortales por el terremoto de magnitud 7,6 que ha sacudido la costa oeste de Japón durante el día de Año Nuevo ha ascendido a 30, al tiempo que las autoridades continúan las labores de rescate tras un sismo que ha provocado importantes daños materiales. 

La mayoría de las víctimas se han registrado en la ciudad de Wajima (15), en la prefectura de Ishikawa, aunque también hay fallecidos en Suzu (6), Nanao (5), Anamizu (2), Hakui (1) y Shika (1), si bien las afectaciones se extienden a las prefecturas de Niigata, Fukui, Toyama y Gifu, tal y como ha informado la agencia de noticias Kiodo News. 

Las autoridades se han apresurado a evaluar los daños, pero las continuas réplicas (se han registrado unas 130 réplicas) y los escombros han obstaculizado las labores de rescate. Como consecuencia del temblor, se han derrumbado varios edificios y se ha producido un incendio a gran escala cerca de un mercado en Wajima en el que se han calcinado alrededor de 200 edificios.

La Agencia Meteorológica de Japón ha levantado el aviso por tsunami, horas después de suspender la "alerta por tsunami importante", aunque ha instado a la población a tener cuidado en el mar porque es probable que el nivel de la marea cambie durante los próximos días. El terremoto ha afectado también la red de transporte y algunas líneas de tren bala y vuelos en la zona han sido suspendidos. 

El primer ministro nipón, Fumio Kishida, ha convocado un "cuartel general de respuesta a emergencia a desastres" bajo su dirección y ha anunciado la movilización de las fuerzas de seguridad y emergencia del país, mientras que ha confirmado "daños a escala extremadamente grande, incluyendo numerosas víctimas humanas, derrumbes de edificios e incendios". 

"Lo primero que debemos hacer es comprender la situación sobre el terreno. Hemos estado haciendo todo lo posible desde anoche para recopilar información, pero debido al cierre de carreteras, es extremadamente difícil ingresar a la parte norte de la península de Noto", ha explicado. 

Kishida, que ha cifrado en un millar los militares que participan en las operaciones de rescate, ha manifestado que "a medida que pasa le tiempo, el efecto del desastre se vuelve cada vez más claro" y ha advertido de que "salvar las vidas de las víctimas del desastre es una carrera contra el tiempo". 

El seísmo, con un hipocentro en torno a los diez kilómetros de profundidad ha sido el más intenso de la cadena de 20 terremotos registrados entre las 08.06 y 09.29 (hora peninsular española) en las inmediaciones de la costa de Ishikawa y la vecina prefectura de Niigata. 

Japón retira las alarmas de emergencia tras el terrible terremoto