Una madre embarazada salva la vida de su hijo antes de nacer gracias al instinto maternal
Una madre asegura que su instinto maternal salvó la vida de su bebé a punto de nacer, después de correr al hospital convencida de que algo andaba mal a pesar de no mostrar señales de advertencia.
Jemma Austin, de 43 años, tenía el presentimiento de que algo no estaba del todo bien cuando tenía 22 semanas de embarazo. “Estaba paseando con el perro y tuve la sensación de que debía ir a ver a mi doctor. No tenía ningún síntoma, pero sabía que debía entrar. No podía ignorarlo. Era el instinto de una madre", aseguró Jemma.
Jemma y su pareja, Paul Jordan, habían estado tratando de tener un bebé durante cinco años y se habían sometido a dos rondas de FIV.
Tuvo suerte de que entrara, ya que los médicos encontraron que su cuello uterino estaba abierto y medía 8 milímetros. “Me preguntaron por qué entré”, dijo. “Dije que tuve algún dolor, pero en verdad solo fue mi instinto”.
El equipo médico logró colocar una sutura cervical y Jemma permaneció en reposo en cama en el Worcestershire Royal Hospital durante dos semanas hasta que se puso de parto a las 24 semanas.
El bebé de la pareja, llamado Axel, nació 14 semanas antes el 12 de febrero de 2020, con un peso de solo 0,77 kg. “Era tan pequeño cuando nació. Pude abrazarlo por un momento antes de que se lo llevaran".
Axel pasó 107 días en el hospital, pero finalmente regresó a casa con sus padres el pasado mes de junio. Ahora se acerca a su primer cumpleaños y es un niño de lo más feliz.
“Es un milagro”, dijo Jemma. “Me siento muy afortunada de tenerlo”.