China vuelve a sufrir una ola de contagios por coronavirus. Exactamente en la ciudad taiwanesa de Kaohsiung los contagios comienza aumentar de nuevo y ha sido la propia localidad la que se ha autoconfinado para frenar el contagio del virus. El volver a ponerse en cuarentenas complica la situación para las jóvenes.
Una madre de un menor de edad, que seguía insistiendo en salir, no sabía cómo evitar que su hijo incumpliera las normas. Por ello ideo un plan con el apoyo de un peluquero. En un principio, tanto la mujer como el peluquero pensaron en hacerle una inscripción en la cabeza que dijera 'Covid-19', pero creyeron que no sería suficientemente efectivo, por lo que decidieron raparle solo la mitad de la cabeza.
Cuando el joven se vio, no le quedó otra que comenzar a discutir con su madre, pues el resultado no le gusto como era de esperar. En cambio el peluquero tuvo algo más de suerte. Al difundirse el hecho a través de los diferentes medios y redes sociales, el peluquero recibió varias llamadas de padres interesados en hacer lo mismo.
Por esta razón, le surge la idea al peluquero de hacer "cortes preventivos por coronavirus" de manera gratuita, a modo de promoción, a adolescentes comprendidos entre las edades de 12 a 15 años.
Como consecuencia de este maquiavélico plan es que cuestionan si dicho corte de pelo es maltrato o no. Y es que, China aún no firma la Carta de Derechos Humanos de los Niños, en la que se establece que el niño debe crecer en un ambiente de afecto y de seguridad moral y material. Por lo que, los niños siguen sin beneficiarse plenamente de sus derechos, siendo principalmente impedida su libertad de expresión.
Sin embargo, y aunque China aún no suscriba la carta, la Convención sobre los Derechos del Niño estipula que es maltrato porque viola el libre desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social.