Los sacos de café y los restos de poda sirven para tratar aguas residuales
Favorecen el crecimiento de microorganismos capaces de eliminar contaminantes
Un estudio del Urban River Lab, formado por el Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CEAB-CSIC), Naturalea Conservació, la Universitat de Barcelona (UB) y el Consorci Besòs-Tordera, ha revelado que los sacos de café y los restos de poda son una "solución natural" para tratar aguas residuales de casas aisladas o de pequeños núcleos urbanos.
El equipo ha estado buscando en su laboratorio en la estación depuradora de Montornès del Vallès (Barcelona) soluciones de bajo coste y bajo impacto ambiental que puedan servir para tratar las aguas residuales, "reduciendo las consecuencias negativas sobre los ríos receptores", informa el CEAB-CSIC este martes en un comunicado.
Ha probado alternativas a los métodos ya conocidos para depurar las aguas residuales, como los filtros de gravas que, "si bien son eficaces, suponen un alto coste económico y ambiental", ya que deben extraerse y transportarse con maquinaria pesada y durante largas distancias, generando contaminación.
La solución que el grupo ve como un "éxito" ha sido la combinación de sacos elaborados con fibras naturales (sacos de yute y coco que se utilizan para almacenar café y que después se convierten en desechos de la industria alimentaria) y de restos vegetales (procedentes de la poda de ramas y de la recogida de hojas de árboles).
Se ha optado por estos materiales por su origen natural, porque están disponibles en todas partes (son de kilómetro cero) y porque "supone dar una nueva vida a los residuos".
RESULTADOS
El responsable técnico del Urban River Lab, Miquel Ribot, ha explicado que el tratamiento de las aguas residuales con estos materiales se ha testado durante medio año, y que se ha evaluado la capacidad de retener contaminantes de los sacos y restos vegetales: de cada uno de ellos, de forma separada y combinándolos y también, añadiendo plantas acuáticas.
Los resultados han concluido que estos sacos y restos de poda favorecen el crecimiento de microorganismos capaces de retener y eliminar contaminantes, como amonio y fosfato, "siendo buenos materiales para diseñar sistemas naturales de depuración", y que la forma más efectiva de utilizarlos es de forma combinada.
Además, la investigación ha evidenciado que los mejores resultados de depuración se alcanzan cuando, además de ambos materiales, se introducen plantas acuáticas en los canales, ya que éstas propician las condiciones idóneas para que los microorganismos proliferen.