Suiza investiga al Rey emérito por ingresar dinero después de sus viajes oficiales a países árabes

rey emérito

Los fiscales suizos han encontrado un patrón entre los viajes del rey emérito a países como Arabia Saudí, Dubai, Kuwait o Baréin y los ingresos de dinero realizados durante años en la cuentas que se vinculan con el rey emérito en el país, considerado durante años, un paraíso fiscal del planeta. Según explica fuentes conocedoras del caso, los investigadores helvéticos analizan los viajes oficiales del rey emérito "desde hace 20 años" a los países árabes hasta descubrir en varias ocasiones, ingresos de cuentas investigadas, de cantidades mayores del millón de euro.

La fiscalía suiza investigaría tres ingresos de efectivo distinto que vincula a viajes del rey emérito a Kwait, a donde el Juan Carlos de Borbón viajó de forma oficial en 2010, 2011 y 2014. Los investigadores helvéticos tendrán además correlaciones muy parecidas con entradas de dinero en cuentas en Suiza tras viajes  a Baréin, Dubai Abu Dabi o Emiratos Árabes. En Baréin, la comisión rogatoria enviada a España por Suiza confirma el cobro de 1,9 millones de euros desde allí por parte de la Fundación Lucum, controlada por el monarca desde Panamá.

Según fuentes investigadoras, esta es una de las principales ramas de investigación que Suiza mantiene abierta desde 2018 por el patrimonio oculto del rey emérito en el país, pero es la que menos le interesa a los fiscales españoles, ya que al ser viajes oficiales en los que el rey emérito era la autoridad principal del estado, sería inviolable a ojos de la justicia española, siempre que se confirmen los traslados de dinero.

En Suiza, el horizonte judicial es distinto ya que, el único límite legal para la investigación al rey emérito, es el período de prescripción de los delitos financieros según su propio ordenamiento jurídico. En este caso, abierto desde agosto de 2018, el peso de las investigaciones recae de manera formal en el fiscal Yves Bertossa, pero son varios los compañeros y funcionarios de apoyo que rastrean el dinero que pasó al menos por tres bancos locales (Mirabaud, Credit Suisse y Lomard Odier) y por una red de distintas sociedades.

En el primer momento las investigaciones se abrieron un posible delito de "cohecho internacional", con el objetivo de confirmar si pudo haber delito en Suiza con el posible traslado de fondos, y después analizar si el delito pudo seguir, mantenido en el tiempo, con lo que el período de prescripción dejaría de tener efecto.  En España, la Fiscalía abrió también diligencias ante las diversas sospechas de corrupción, pero solo en una operación concreta: el contrato del Ave a La Meca, el mayor encargo de obra civil licitado en el mundo, el cual fue concedido a un consorcio público-privado español por el Gobierno de Arabia Saudí en 2010. Finalmente, la investigación en España se centró en el papel de empresarios como Juan Miguel Villar Mir, que negó siempre cualquier pago u comisión al rey emérito.

Por el momento, Suiza analiza los movimientos de todas las cuentas vinculadas al rey emérito en el país, ha interrogado a sus gestores como testigos, como la investigación de la empresaria Corinna Zu Sain-Wittgenstein tras recibir una donación de 65 millones de dólares, ha preguntado también como testigo al empresario Álvaro de Orleans que controlaba sobre el papel la fundación del rey emérito y otra en la que se pagaron hasta siete millones de euros en viajes, y ha abierto el expediente al banco Mirabaud antes la sospecha de que no implementó  de forma diligente los mecanismos de prevención del blanqueo de capitales al tener al rey emérito como cliente.