Ángel Hernández, el hombre que ayudó a su esposa a morir, feliz por la aprobación de la Eutanasia: "Lo volvería a repetir"
El caso de María José Carrasco, la mujer que padecía esclerosis múltiple y pidió a su marido Ángel Hernández que la ayudara a morir se hizo muy conocido. Ayer el gobierno ratificó la aprobación de la Ley de Eutanasia.
Ahora Ángel Hernández asegura estar muy feliz: "¿Si ha merecido la pena? Lo volvería a repetir. Mi mujer tuvo mi ayuda para morir, pero esta ley, a ella le hubiera servido para irse más tranquila sin pensar lo que me podría ocurrir porque sabíamos que me iban a imputar".
Ángel siguió la votación de ayer desde la fachada del Congreso de Diputados, junto a otros cuatro familiares que también esperaban la aprobación de la Ley de Eutanasia.
Hernández explica que pese a todo lo que ha pasado por ayudar a su esposa, ha merecido la pena: "Si hubiera tenido miedo a que me imputaran no lo hubiera hecho, pero se hizo así para que esta ley saliera adelante".