Andalucía pone en marcha el protocolo anti sumisión química por pinchazo
La Junta de Andalucía, a través de las consejerías de Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa; Salud y Consumo; Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad y de Justicia, Administración Local y Función Pública, ha puesto en marcha el protocolo de actuación ante sospecha de sumisión química por objeto punzante.
Estas áreas han trabajado conjuntamente en la actualización del procedimiento ya existente --el Protocolo de Actuación y coordinación sanitaria ante agresiones sexuales en Andalucía 2020-- como consecuencia de las agresiones que se han producido en las últimas semanas. El texto anterior, ya incluía la actuación sanitaria en caso de sospecha por sumisión química, según ha recogido la Junta en un comunicado.
El nuevo texto, que recoge los casos actuales por objeto punzante, recuerda que estos 'pinchazos' son agresiones y constituyen un delito, que conllevan la emisión de un parte de lesiones y una atención sanitaria urgente, ante la posible situación de sumisión química asociada al pinchazo.
En este sentido, el objetivo general de este protocolo es dar una eficiente respuesta social, mediante la colaboración de todas las administraciones implicadas: las consejerías ya mencionadas, junto a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el Instituto Andaluz de la Mujer, Juzgados, Fiscalía y el Instituto de Medicina Legal.
En concreto, el protocolo establece un procedimiento ante las agresiones por 'pinchazo' con o sin agresión sexual y un diagnóstico de sospecha por sumisión química. Asimismo, ofrece la respuesta médico-legal oportuna que garantice los derechos de la víctima y una guía de procedimiento a nivel extrahospitalario definiendo los pasos a seguir y la documentación legal imprescindible.
Así, una vez atendida a la víctima en Urgencias de centros hospitalarios y Atención Primaria o a través del servicio de emergencia 112, se le tomarán muestras que serán custodiadas en laboratorios de Análisis Clínicos o Áreas encargadas para tal fin. Posteriormente, serán enviadas al Instituto Nacional de Toxicología.
Además, entre otras medidas, el protocolo contempla el ofrecimiento de apoyo psicológico y legal para las víctimas de estos actos delictivos. Cabe recordar que el Instituto Andaluz de la Mujer cuenta con dos programas asistenciales para víctimas de agresiones sexuales: el Servicio de atención telefónica inmediata 24 horas contra la violencia sexual y el Servicio de asesoramiento jurídico, asistencia legal y atención psicológica a mujeres víctimas de violencia sexual y abusos sexuales en Andalucía.
Por su parte, la Consejería de Justicia recuerda la importancia de que las víctimas denuncien de manera inmediata este tipo de agresiones, para activar los procesos necesarios en el ámbito de la Administración de Justicia.
El documento define la sumisión química (SQ) como la agresión sexual, robo, extorsión o maltrato que sufre una persona a la que se le ha administrado de forma deliberada una sustancia psicoactiva para anular su voluntad. Asimismo, incide en que la SQ es un problema de salud y una forma de violencia.
El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ya ha remitido el protocolo a todos los centros sanitarios y, próximamente, se publicará también en la página web.