La historia del pequeño Juan: Con solo 7 meses recibió el hígado de su padre

Trasplante - CBN.

Hoy día 30 de marzo se celebra el Día Internacional del Transplante y Antonio, su padre, recuerda el momento entre lágrimas

Hace 5 años en el hospital La Paz de Madrid, era intervenido con tan solo siete meses el pequeño Juan que el próximo mes cumplirá 6 años. Pero no es el único cumpleaños que celebra ya que cada 28 de noviembre celebra el de su vida, y es que recibir parte del hígado de su padre le salvó la vida.

El pasado miércoles 30 de marzo se celebraba El Día Nacional del Trasplante y Antonio, padre de Juan, se emocionaba contando su historia. Para ellos, su vida cambió cuando su hijo tenía tan solo un mes y medio y le detectaron una atresia en las vías biliares que no permitía el paso de la bilis al intestino. Entraban así en la lista de espera de trasplantes de hígado.

Aunque no fue la primera opción, ya que se intentó realizar una cirugía de transición que en el 50% de los casos era exitosa, pero no lo fue en este. En paralelo a la espera de un trasplante, sus padres se preparaban para la posible necesidad de que uno de ellos tuviera que hacerlo.  "Se mezclan muchos miedos, quieres hacerlo porque es tu hijo y la profesionalidad de los médicos te anima, la talla de la sanidad española es bestial", comentaba Antonio.

La decisión no es fácil de tomar, narra Anotnio, pero los médicos explican las consecuencias que pueden quedar y la posibilidad de que la fuente de ingreso del hogar quede invalidada por la operación. Aunque exista un riesgo bajo, también hay posibilidad de fallecimiento. Por ello, piden que no sientan culpabilidad aquellos que no lo hacen y optan por esperar el trasplante.

El proceso del trasplante, comenta Antonio que es duro y que durante los primeros años Juan pasaba la mitad de su vida en el hospital, incluso su madre tuvo que dejar su trabajo para poder estar con él en el hospital. Además, explica las dificultades que se pueden presentar, en el caso de su hijo, tuvo que ser operado y posteriormente sufrió una infección bacteriana. Pese al trasplante, la enfermedad es crónica y sigue estando ahí, por ello, la medicación para combatirla es de por vida. 

Antonio admite que la conexión con el pequeño es especial y diferente a la que siente con el mayor, como un sentimiento de responsabilidad y dependencia. Además, halaga a la sanidad pública en España y destaca que desde que iniciaron el proceso ellos se sintieron dentro de una gran familia.