El diagnóstico precoz es imprescindible para frenar la degeneración macular

Foto doctor Fernández Choquet de Isla

Se trata de la principal causa de ceguera en mayores de 60 años, pero actualmente existen tratamientos para estabilizar la visión, e incluso mejorarla

El diagnóstico precoz es imprescindible para frenar la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), principal causa de ceguera en mayores de 60 años, por lo que “la clave está en acudir pronto al oftalmólogo, según ha señalado el doctor José Ignacio Fernández Choquet de Isla, especialista del servicio de Oftalmología del Hospital Quirónsalud Córdoba.

 

El doctor Fernández Choquet de Isla ha explicado que la degeneración macular asociada a la edad es una enfermedad ocular crónica que afecta a la mácula, que es la parte central de la retina responsable de la visión detallada y precisa. Los pacientes que la padecen suelen notar una pérdida progresiva de nitidez en el centro del campo visual, llegando en ocasiones a percibir una mancha borrosa o deformada que dificulta actividades cotidianas como leer o reconocer rostros.

 

Muchos pacientes “llegan a consulta preocupados porque notan que ya no ven igual, sienten que las líneas se ondulan o que les cuesta leer, estos síntomas pueden ser el primer aviso de la enfermedad”, ha señalado el especialista. Acudir pronto al especialista es “fundamental para evitar daños irreversibles, ya que actualmente existen tratamientos que permiten estabilizar e, incluso, mejorar la visión en muchos casos”.

 

Se trata de una patología cada vez más frecuente debido al progresivo envejecimiento de la población. Existen dos variantes, la forma seca, que es la más habitual y progresa de manera lenta, y la forma húmeda, menos frecuente pero más agresiva, que puede causar un deterioro visual rápido en cuestión de días o semanas.

 

Entre los principales factores de riesgo se encuentran, según ha indicado el doctor Fernández Choquet de Isla, la edad avanzada, el tabaquismo, los antecedentes familiares y la exposición prolongada a la luz ultravioleta sin protección adecuada.

 

Respecto a los tratamientos, el especialista ha destacado que el seguimiento oftalmológico periódico es fundamental para controlar la evolución de la DMAE y detectar a tiempo posibles cambios hacia la variante húmeda, que puede tratarse eficazmente con inyecciones intravítreas. Estos medicamentos permiten frenar su avance y, en muchos casos, mejorar la visión si se actúa de manera precoz.

 

El Hospital Quirónsalud Córdoba cuenta con especialistas en esta enfermedad, así como tecnología de última generación para diagnosticarla y tratarla, ofreciendo una atención personalizada para mejorar la calidad de vida de los pacientes.