El ejercicio reduce hasta un 23% el riesgo de enfermedades cardiovasculares
Según un nuevo estudio, el ejercicio regular puede reducir hasta en una cuarta parte el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, en parte al disminuir el estrés.
La investigación reveló que hacer ejercicio ayudaba a reducir la actividad cerebral relacionada con el estrés, que se asocia al desarrollo de enfermedades cardiovasculares.
El estudio, en el que participaron más de 50.000 personas, descubrió que quienes cumplían las recomendaciones de hacer ejercicio durante 150 minutos a la semana tenían un riesgo un 23% menor de desarrollar enfermedades cardiovasculares que quienes no las cumplían.
Y los que sufrían trastornos relacionados con el estrés, como la depresión, eran los que más beneficios obtenían del ejercicio.
Los expertos afirman que el estudio, publicado en la revista Journal of the American College of Cardiology, demuestra cómo la actividad física puede producir efectos beneficiosos en el cerebro.
Para evaluar los mecanismos subyacentes a los beneficios psicológicos y cardiovasculares de la actividad física, los investigadores analizaron los historiales médicos y otros datos de 50.359 participantes del Biobanco Mass General Brigham que completaron una encuesta sobre actividad física.
Un subconjunto de 774 participantes se sometió a pruebas de imagen cerebral y se les tomaron medidas de la actividad cerebral relacionada con el estrés.
El estudio, dirigido por investigadores del Hospital General de Massachusetts, descubrió que, durante un seguimiento medio de diez años, el 12,9% de los participantes desarrollaron enfermedades cardiovasculares.
Los que cumplían las recomendaciones de actividad física tenían un riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares casi una cuarta parte menor (23%) que los que no cumplían las mismas recomendaciones, y también tendían a tener una menor actividad cerebral relacionada con el estrés.
Los investigadores descubrieron que la reducción de la actividad cerebral asociada al estrés se debía sobre todo al aumento de la función de la corteza prefrontal, una parte del cerebro que interviene en funciones ejecutivas como la toma de decisiones y el control de los impulsos.
Los beneficios cardiovasculares del ejercicio también fueron dos veces mayores en los participantes con depresión (y mayor actividad cerebral relacionada con el estrés).
El Dr. Ahmed Tawakol, cardiólogo del Centro de Investigación de Imágenes Cardiovasculares del hospital y autor principal del estudio, espera que los médicos utilicen la investigación para convencer a más pacientes de que se muevan para reducir el estrés o la depresión.