viernes. 29.11.2024

La doctora Herrador ha explicado que todo dolor agudo que no se trata de forma adecuada se puede cronificar y ser más complejo conseguir una mejoría clínica, por lo que es “fundamental consultar con un especialista en dolor desde que se inicia el proceso”. En este sentido, ha señalado que lo primero que hay que hacer cuando llega un paciente a la unidad es “realizar una exhaustiva historia clínica, ya que sobre ello pivotará luego cualquier tratamiento que podamos hacer y, una vez que se identifica el origen del dolor, se propone un tratamiento médico y/o intervencionista”.

 

El progresivo envejecimiento de la población, gracias al aumento de la esperanza de vida, lleva a una mayor prevalencia de patologías degenerativas y, fundamentalmente, articulares y de columna vertebral y todo ello propicia un importante deterioro de la calidad de vida de los pacientes, ha apuntado la especialista. El 23% de la población andaluza sufre dolor crónico, según el último baremo del dolor realizado por la Junta de Andalucía, ha resaltado.

 

Es frecuente que los pacientes con dolor crónico sufran una incapacidad severa o muy severa, ha afirmado la doctora Herrador, con limitación de su vida laboral, “repercutiendo en su vida diaria y con impacto familiar importante por la necesidad de cuidados que conlleva. Además, observamos que tiene un impacto en la salud mental del paciente, que puede presentar cuadros de ansiedad y depresión”.

 

En cuando a las patologías más frecuentes que están relacionadas con procesos degenerativos articulares y de columna tanto cervical como lumbar se encuentran la lumbalgia, lumbociatalgia, cervicalgia, estenosis de canal lumbar y cervical, artrosis de rodilla y hombro, síndromes miofasciales o lo que se conoce como contracturas musculares, dolores de tipo neuropático que van asociados a lesión del sistema nervioso, síndrome del dolor regional complejo, y neuropatía diabética, entre otras patologías que llevan asociadas a procesos dolorosos, ha explicado.

 

La doctora Herrador ha resaltado que la Unidad del Dolor puede aportar técnicas intervencionistas ya sea con bloqueos y/o radiofrecuencia para conseguir optimizar los tratamientos médicos, consiguiendo mejorar la calidad de vida de los pacientes, “y siempre teniendo en cuenta que deben acompañarse de un estilo de vida saludable, que incluya ejercicio físico diario, control de peso y una dieta sana”.

 

Desde el punto de vista intervencionista “se realizan bloqueos centrales con radioscopia, bloqueos nerviosos guiados por ecografía, técnicas de radiofrecuencia en las que a través de un electrodo administramos una corriente eléctrica a una estructura nerviosa con el fin de producir un efecto analgésico”, entre otras técnicas, según ha indicado la doctora. También se llevan a cabo técnicas más complejas como la neuromodulación y la infusión espinal.

 

Los fármacos que se emplean pueden ser anestésicos locales y corticoides y también se le puede administrar al paciente sangre que se le ha extraído previamente, en el lugar donde se encuentra su dolencia. Está previsto que se introduzca el ozono como tratamiento complementario para la fibromialgia y otras patologías e las que haya evidencia científica de su utilidad.

 

Por su parte, el doctor Rafael Morales, especialista de la Unidad del Dolor, ha insistido en que el dolor crónico, como su propio nombre indica, suele persistir a lo lago de la vida de paciente, con mayor o menor intensidad. Los tratamientos tienen un carácter paliativo, pudiendo repetirse en el tiempo en función del alivio del paciente. Sin embargo, en los procesos agudos, con poco tiempo en evolución, sí es posible la resolución del cuadro de dolor de manera permanente, “de ahí la importancia de acudir al especialista cuando se inicia el proceso”.

 

La Unidad del Dolor del Hospital Quirónsalud Córdoba ha atendido desde que se abrió el centro hospitalario en septiembre de 2018, más de 12.000 pacientes, realizando intervencionismo a más de 6.000 “con gran satisfacción de los pacientes que ven cómo disminuye su dolor y vuelven a su vida laboral, social y familiar”.

 

Quirónsalud en Andalucía

 

El Grupo Hospitalario Quirónsalud cuenta en la actualidad en Andalucía con ocho centros hospitalarios situados en las ciudades de Málaga, Marbella, Los Barrios (Cádiz), tres en Sevilla, Córdoba y Huelva, además de 18 centros médicos de especialidades y diagnóstico y dos hospitales de día quirúrgicos, que lo posicionan como líder hospitalario privado de esta comunidad autónoma.

 

Sobre Quirónsalud

 

Quirónsalud es el grupo de salud líder en España y, junto con su matriz Fresenius-Helios, también en Europa. Además de su actividad en España, Quirónsalud está también presente en Latinoamérica. Conjuntamente, cuenta con más de 50.000 profesionales en más de 180 centros sanitarios, entre los que se encuentran 57 hospitales con más de 8.000 camas hospitalarias. Dispone de la tecnología más avanzada y de un gran equipo de profesionales altamente especializado y de prestigio internacional. Entre sus centros, se encuentran el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, Centro Médico Teknon, Ruber Internacional, Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, Hospital Quirónsalud Barcelona, Hospital Universitari Dexeus, Policlínica Gipuzkoa, Hospital Universitari General de Catalunya, Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón, etc.

 

El Grupo trabaja en la promoción de la docencia (diez de sus hospitales son universitarios) y la investigación médico-científica (cuenta con el Instituto de Investigación Sanitaria de la FJD, acreditado por la Secretaría de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación).

 

Asimismo, su servicio asistencial está organizado en unidades y redes transversales que permiten optimizar la experiencia acumulada en los distintos centros y la traslación clínica de sus investigaciones. Actualmente, Quirónsalud está desarrollando multitud de proyectos de investigación en toda España y muchos de sus centros realizan en este ámbito una labor puntera, siendo pioneros en diferentes especialidades como oncología, cardiología, endocrinología, ginecología y neurología, entre otras.

Expertos advierten: el dolor sin tratar se puede cronificar