Una inmunoterapia eleva la supervivencia en un tipo de cáncer de mama agresivo

Tiene una supervivencia global del 86% de las pacientes a los cinco años

Un estudio del International Breast Cancer Center-Pangaea Oncology de Barcelona (IBCC) ha concluido que añadir un tipo de inmunoterapia a la quimioterapia aumenta la supervivencia de las pacientes con cáncer de mama triple negativo localizado, informa el IBCC este miércoles en un comunicado.

La investigación, publicada en la revista 'The New England Journal of Medicine', ha comprobado que suministrar 'pembrolizumab', un tipo de inmunoterapia, y quimioterapia antes y después de la cirugía para extirpar los tumores tiene "mejores resultados" que administrar solo quimioterapia.

El cáncer de mama triple negativo es el subtipo de tumor de mama "más agresivo y de peor pronóstico", y representa en torno al 15% de todos los tumores de mama diagnosticados.

El estudio se basa en un ensayo clínico que ha contado con la participación de 1.174 pacientes con cáncer de mama triple negativo de 181 centros sanitarios de 21 países de Europa, Norteamérica, Asia y Latinoamérica.

RESULTADOS

A los 5 de años de ser tratadas, el 86,6% de las pacientes que recibieron inmunoterapia y quimioterapia siguen vivas, respecto a la supervivencia global del 81,7% de pacientes tratadas con quimioterapia y placebo.

El director del IBCC, Javier Cortés, ha asegurado que añadir 'pembrolizumab' a la quimioterapia "se traduce en más curaciones", por lo que defiende que este procedimiento debería ser la terapia estándar en pacientes con un tumor mamario triple negativo con un tamaño de 2 centímetros o más.

Cortés ha concretado que esta terapia aumenta cinco puntos las posibilidades de curación de las pacientes, hecho que "significa que, de cada 100 pacientes tratadas con inmunoterapia, hay 5 pacientes más que se van a curar cuando antes no lo hacían".

55,3 MESES SIN CÁNCER

En cuanto al tiempo que las pacientes vivieron libres de enfermedad, el grupo tratado con la combinación de quimioterapia y 'pembrolizumab' estuvo una media de 55,3 meses sin cáncer de mama, frente a los 54,1 meses del grupo que recibió quimioterapia y placebo.

"No debemos olvidar que todavía nos queda mucho por hacer, puesto que hay pacientes que sigue falleciendo como consecuencia de este tipo de cáncer", ha recalcado Cortés para insistir en la necesidad de seguir investigando.