Un club de fútbol de La Coruña busca donaciones para que los niños puedan practicar deporte
Las consecuencias económicas de la pandemia del coronavirus han impactado de lleno con el poder adquisitivo de las familias españolas, tanto es así que muchas de ellas no pueden permitirse siquiera comprar ropa deportiva para que sus hijos disfruten del deporte junto a sus compañeros. Por ese motivo, el Sporting Burgo de Culleredo, un modesto club de fútbol de La Coruña, ha realizado un llamamiento para que todo aquel que esté dispuesto done cualquier tipo de prenda deportiva relacionada con el fútbol (camisetas, pantalones cortos, medias, botas, etc.) para que ningún niño de sus categorías inferiores (unos 300 chavales aproximadamente) se prive de participar en los entrenamientos y partidos.
“Los niños no tienen por qué sufrir esa situación, y desde el club queremos ayudarles, en la medida de nuestras posibilidades”, afirma el presidente del club, Arturo Otero, en relación a las difícil situación que están atravesando las familias con padres afectados por los ERTE, en situación de desempleo o con negocios que no han tenido otra opción que cerrar a raíz de las complicaciones del Covid-19. “Muchos padres nos están donando trajes y botas de sus hijos, y algunos comercios nos ceden sus stocks”, agradece.
Una de las personas más implicadas con el club es el propietario del negocio local Deportes Rayman, José Ramón Gestal, que recientemente ha realizado una generosa donación de botas de fútbol que habían quedado descatalogadas. El hombre explica los propios entrenadores del club van a su establecimiento a comprar botas para los niños que más las necesitan. “Ellos no me lo dicen, pero yo me doy cuenta de cuándo esas botas son para regalar a quién las necesita, y se las dejo más baratas”, asegura Gestal.
Desde el club explican que tratan de sobrellevar el asunto con la máxima discreción posible para proteger la intimidad de las familias: "No queremos que nadie más que nosotros sepa qué familias no tienen recursos”, explica Otero junto al campo en el que los chavales entrenan y disputan los partidos cuando ejercen de locales 'A Lavandeira'. “Hacemos las donaciones de ropa y calzado en privado, fuera de hora y lejos de estas instalaciones”, resume el presidente.