Cruz Roja reparte abrigo entre las personas sin hogar ante la llegada del frío
El voluntariado de la entidad atiende estos días alrededor de 80 personas cada una de las tres noches a la semana que sale su Unidad de Emergencia Social (UES)
Con la llegada del frío y la lluvia, se acrecienta la situación de extrema vulnerabilidad en la que viven estas personas
El voluntariado de Cruz Roja ha comenzado a repartir en los últimos días entre las personas sin hogar de la ciudad distintos productos de abrigo que les permitan protegerse del frío.
Así, además de la habitual entrega de material de higiene y de comida y bebida reparadora (en esta época, leche y caldo caliente), el personal de la Unidad de Emergencia Social (UES) de la institución humanitaria está ofreciendo a la población que se encuentra en la calle sacos de dormir, y en los próximos días está previsto el reparto también de mantas y esterillas, para hacer algo más llevadera la bajada de las temperaturas a quienes la han de afrontar en estas circunstancias de extrema vulnerabilidad.
“Con la llegada de la lluvia y del frío, las condiciones a las que se exponen las personas sin hogar se vuelven más extremas. Desde Cruz Roja somos conscientes de ello y seguimos luchando y trabajando para poder mitigar las consecuencias que acarrean estas situaciones, llevándoles mantas, sacos de dormir, esterillas y comida y bebida reparadora. Y lo más fundamental, una mano amiga que le ofrezca compañía en estos momentos”, explica Elena Teruel, técnica de la UES.
Dicho dispositivo, conformado íntegramente por voluntariado, recorre tres noches a la semana las calles de la capital (martes, jueves y sábado), y en estos últimos días, el voluntariado de Cruz Roja ha atendido en cada una de sus salidas alrededor de 80 personas.
La UES –que cuenta con financiación de la Consejería de Inclusión Social, Familias, Juventud e Igualdad de la Junta de Andalucía- busca servir de enlace para intentar, en la medida de lo posible, integrar al colectivo de personas sin hogar en la red de asistencia normalizada, con objeto de promover de este modo su inclusión en la sociedad.
A día de hoy, son alrededor de 60 las personas que participan como voluntarias en este proyecto, que se realiza en coordinación con el resto de entidades que conforman la Red CO-HABITA de atención a personas sin hogar, de la que también forman parte Adeat, Fundación Prolibertas, Hogar Sí, Cáritas, Fundación Don Bosco y el propio Ayuntamiento de Córdoba.
Precisamente las distintas entidades que participan en esta red colaboran en el programa municipal ‘Ola de frío’ que arranca mañana 1 de noviembre.