El cuidado de la piel, especialmente del rostro, es un proceso dinámico, que puede verse modificado por las condiciones atmosféricas, por reacciones cutáneas o por el descubrimiento de un nuevo producto que se incorpore al día a día. Sea cual sea el caso, es importante, indican dermatólogos y farmacéuticos, seguir una estricta rutina en la que limpieza e hidratación son dos pilares fundamentales. En verano se hace necesario sumar algún paso, mientras que hay otros de los que se puede prescindir. Carolina Nieto, farmacéutica experta en cuidado de la piel y fundadora, junto a sus hermanas, de la firma de cosméticos Alevoo, nos da las claves para conseguir una piel sana y bonita.
Menos pasos pero más efectivos. En 2021 triunfa el ‘menos es más’ de Mies van der Rohe, también en términos de cuidado del rostro, pero Carolina lleva años aconsejando a quienes a acuden a su farmacia bajo estos parámetros y ahora también lo hace desde la marca que comparte con sus hermanas: “Recomendamos una rutina de belleza minimalista basada en la limpieza y la hidratación de la piel. El paso más importante es la limpieza”. La piel limpia y seca es la mejor de las bases para cualquier tratamiento y, aunque es imprescindible en la rutina facial durante todo el año, cobra importancia en verano.
“Para nosotras lo más importante es tener una piel sana, hidratada y luminosa durante todo el año”, introduce Mónica, farmacéutica y fundadora de Alevoo. Verano es la época en la que aumenta el número de factores peligrosos con la piel: “El primero que se nos viene a todos a la cabeza es una mayor exposición solar, bien sea en la playa, en la piscina, la montaña, en una terracita…”. Explica Mónica, además, que esta exposición al sol produce una mayor sequedad y deshidratación de la piel, que se une al uso reiterado de fotoprotectores que, en muchas ocasiones, resultan oclusivos y no dejan respirar la piel, por lo que la ensucian.
El exceso de sudoración se suma a la lista y es responsable de generar un número mayor de toxinas que dan lugar a brillos e imperfecciones en la piel. Mientras que el cloro de la piscina y el agua del mar también son dos de esos agentes externos dañinos estivales. Para hacer frente a ello se recomienda, beber abundante agua, evitar la exposición solar en las horas centrales del día, protegerse del calor y mantener una alimentación saludable, pero existen otros pasos, en la rutina diaria, a tener en cuenta.
La cosmética natural es su gran apuesta y desde su firma, Alevoo, recomiendan productos adecuados a las características que presenta la piel en esta estación del año. “En esta época del año debemos aumentar la frecuencia de limpieza y de hidratación y nutrición de la piel con nuestros cosméticos ecológicos, puesto que, la limpieza es siempre el paso más importante y debe hacerse sin dañar su barrera protectora, la microbiota”, indica. Primero, apuesta por un limpiador con propiedades antisépticas y emolientes, como es el jabón artesano Alevoo. Después, aplicación un sérum rico en antioxidantes, vitamina E y extractos naturales antimanchas y antiedad (en su caso el de Alevoo). Por último aconseja hidratar con una crema de día o de noche (según el momento), con activos naturales.
Carolina aprovecha, además, para defender el ingrediente y protagonista de la cosmética en la que cree: el aceite de oliva virgen extra. El de Alevoo, la firma fundada por ella y sus otras tres hermanas, es toda una joya ecológica, con denominación de origen protegida (DOP) Sierra de Cazorla y certificado por el Comité Andaluz de Agricultura Ecológica (CAAE), que goza de éxito internacional en Oriente Medio y que ha saltado a la cosmética: “por ser rico en vitamina E y antioxidantes naturales, que proporcionan propiedades antiinflamatorias y emolientes”. Un lujo para la piel, nuestro oro líquido, que el mundo de la belleza sigue explorando.
