Siete médicos antivacunas que asistieron a una conferencia sobre el covid-19 celebrada en Florida (Estados Unidos) enfermaron a causa del coronavirus pocos días después. Uno de los asistentes a la cumbre fue Bruce Boros, quien dijo haber estado "tomando ivermectina durante 16 meses" junto con su esposa y no se "había sentido más sano" en toda su vida.
Un par de días tras el evento, en el que se discutieron distintos tratamientos alternativos, el acérrimo antivacuna comenzó a presentar síntomas del covid-19, según contó el organizador principal del evento, John Littell a 'Daily Beast'. Junto con Boros, otros seis médicos, de entre los cerca de 900 asistentes, reportaron padecer la enfermedad días luego de haber asistido al evento.
No obstante, Littell negó que la conferencia fuese un evento de gran difusión: “Creo que lo habían cogido en Nueva York o Michigan o de donde sea que fueran [...] Fueron realmente las personas que volaron desde otros lugares”. Y defendió que, hasta el momento, el tratamiento con ivermectina había funcionado en aquellos que se contagiaron. “Bruce está bien”, asegura Littell, aunque según el Daily Beast, fuentes cercanas confirmaron que Boros está gravemente enfermo en su casa de Key West.
Boros administraba ivermectina a varios pacientes, incluido su padre
Según los informes, Boros comenzó a tomar ivermectina como un proyecto de investigación personal el verano pasado y se la ha administrado a varios pacientes, incluido su padre, de 97 años, quien más tarde optó por recibir una vacuna contra el covid. Boros contó que a su padre le habían "lavado el cerebro" y que a él le entraban ganas de "darle una paliza", de lo "molesto" que estaba con él.
Boros le quitó la ivermectina a su padre después de descubrir que estaba vacunado y luego culparía a la misma vacuna como una de las razones por las que su padre murió. "Estamos viendo un número astronómico de muertes de personas que han sido vacunadas, particularmente las personas mayores", dijo en la conferencia.
La Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) no ha aprobado el uso de la ivermectina para tratar o prevenir el covid en seres humanos. Las tabletas de ivermectina están aprobadas en dosis muy específicas para algunos gusanos parásitos, y existen formulaciones tópicas (sobre la piel) para los piojos y las afecciones de la piel como la rosácea. La ivermectina no es un antiviral (un medicamento para tratar los virus).
