El Consejo de Gobierno ha incluido en el Decreto Ley 5/2021 aprobado este martes una línea de ayudas directas para las agencias de viajes dirigida al mantenimiento de su actividad y a compensar la caída de ventas o ingresos derivada de los efectos económicos de la pandemia por coronavirus. Esta subvención tendrá un presupuesto de 5,2 millones de euros y supondrá el pago de 3.000 euros a cada una de las agencias de viajes.
Podrán ser beneficiarias de las ayudas las personas titulares de las agencias de viajes con sucursales abiertas al público y las personas titulares de las agencias de viajes 'online', cuya actividad se preste a través de los servicios de la sociedad de la información, siempre que, teniendo todas ellas la condición de pyme, hayan experimentado una caída de ventas o ingresos a causa del impacto económico negativo de la crisis sanitaria y las medidas acordadas para paliarla.
Igualmente, deberán acreditar que ejercen su actividad con anterioridad a la fecha de la entrada en vigor del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria, manteniéndola vigente con carácter previo a la concesión de la subvención.
Será obligatorio tener domicilio fiscal en Andalucía, estar de alta en el Impuesto de Actividades Económicas y estar inscrita en el Registro de Turismo de la comunidad en todo el periodo señalado.
Las agencias de viajes, como empresas profesionales dedicadas a la intermediación turística, juegan un papel clave en la reactivación del destino Andalucía. Son las encargadas de la organización, oferta o comercialización de viajes combinados y de la intermediación en la prestación de cualquier servicio turístico.
Uno de los principales objetivos de la Consejería de Turismo es afianzar el posicionamiento de Andalucía como uno de los destinos prioritarios para los mercados internacionales, considerados de potencial creciente. En este contexto, es fundamental el impulso de la Administración, de la mano de las pymes turísticas, destacando el papel de las agencias de viajes por su directa interlocución con agentes y touroperadores internacionales.
La situación de las pymes del sector de intermediación turística es especialmente grave, ya que vieron interrumpida su actividad debido a las medidas de contención de la pandemia decretadas por el Gobierno, lo que dejó suprimidos sus ingresos. Las que han reanudado la actividad la han visto muy limitada y duramente afectada su facturación por la gran contracción de la demanda y las limitaciones impuestas a causa del Covid, sin que la situación, a día de hoy, haya mejorado sustancialmente para ellas.
