En los pasillos del Hospital Universitario Reina Sofía se ha ha respirado alegría el día de hoy. Los helados del verano han llegado de la mano de Daniele y su carrito, para repartir alegría a los niños hospitalizados. Vainilla, fresa, limón, chocolate, stracchiatella...son muchos los diferentes sabores que han endulzado el día de los más pequeños.
Este querido heladero italiano, llamado Daniele, residente en Córdoba, tiene una preciosa tradición que, este año no podía faltar, repartir helados a los más pequeños del hospital que no pueden acudir a la calle para disfrutar de un refrescante y dulce helado veraniego, para ver como se dibujan sonrisas de alegrías en sus caras, a pesar del mal momento que puedan estar pasando.
🍦🍨👦👧 Daniele Scolari, de #heladería @Buonisssimo, se ha vuelto a pasear esta mañana por las estancias pediátricas de nuestro complejo hospitalario repartiendo riquísimos helados artesanos a niños, familiares y profesionales. #ActividadesMotivacionales #HumanizaciónInfantil pic.twitter.com/NZOweI7FZl
— Hospital Universitario Reina Sofía (@HUReinaSofia) August 17, 2022
Después del gran parón debido a la pandemia, estos pequeños pueden volver a disfrutar de la emotiva y solidaria visita de Daniele. Acompañado de su carrito y bocina, Daniele intenta con esta iniciativa, hacer mucho más llevadera la etapa dura que supone un ingreso en el hospital, ya no solo para los niños, sino para sus padres, los cuales se llenan de energías al ver la cara de felicidad de sus pequeños al degustar uno de estos ricos helados artesanales.
El factor mental es muy importante en la recuperación de ciertas enfermedades, además de que facilita en ocasiones hasta los tratamientos pues, al fin y al cabo, son niños, y un ingreso trae con él muchas cosas desagradables para un pequeño. Por esta misma razón, la preciosa iniciativa de Daniele, no solo es una alegría para todos los pequeños o sus familiares, sino para el hospital al completo, siendo un claro ejemplo de lo bonito que es hacer sonreír a los demás.