Marenostrum Fuengirola despidió anoche al histórico grupo de rumba flamenca, Los Chichos, con un concierto que quedará grabado en la memoria de todos los presentes. En el marco de su emotiva gira de despedida tras 50 años de éxitos y una carrera inigualable, la banda madrileña ofreció un espectáculo lleno de nostalgia, haciendo que el público cantara y bailara las canciones del carismático trío y celebrando una trayectoria que ha marcado a varias generaciones.
Las ganas de concierto se sentían en el aire desde horas antes, en el paseo marítimo. Los fans, impacientes, contaban cada minuto hasta el inicio del espectáculo para disfrutar de las emblemáticas rumbas de Los Chichos. Los asistentes gozaron de una cuidada selección de los mejores éxitos del grupo, haciendo un recorrido musical por su extensa y memorable carrera.
Cuando las luces se atenuaron y la multitud estalló en aplausos, Los Chichos subieron al escenario, desatando una ola de emociones entre los asistentes. Con los primeros acordes de sus guitarras y la inconfundible voz de Emilio González, el recinto se llenó de una energía contagiosa. Iniciaron con tres de sus clásicos: "Sea Como Sea", "Son Ilusiones" y "Amor de Compra y Venta".
La conexión con el público fue notoria. Interpretaron cada una de las canciones con la pasión que los ha caracterizado durante cinco décadas y para dar paso a su cuarta canción "Mujer Cruel", la banda se dirigió a los fans diciendo: "Gracias Fuengirola por estar aquí con nosotros". En lo más alto de la velada, el público se puso a bailar y a cantar las que parecieran sus últimas canciones para esta noche: "Vente Conmigo Gitana", "Quiero Ser Libre" y "Bailarás con Alegría".
Tras su primera despedida, Los Chichos volvieron al escenario para el esperado bis, dedicando al público dos de sus temas más emblemáticos como "La historia de Juan Castillo" y "Ni más ni menos", cuyas letras resonaron en el recinto fuengiroleño rodeados de vítores y expresiones de gratitud.
Con el eco de las últimas notas aún presentes en el aire, Los Chichos se despidieron del escenario dejando atrás una noche muy especial para Fuengirola. La gira de despedida celebró 50 años de una carrera inigualable a través de décadas de canciones, éxito tras éxito. El público, visiblemente conmovido, despidió al trío con un mar de aplausos y ovaciones, agradeciendo por tantos años de música y momentos compartidos. El concierto en el Marenostrum Fuengirola no solo marcó el fin de una era, sino también el legado que dejan Los Chichos en todos sus seguidores.