Luis Fonsi fue uno de los protagonistas, junto a Belén López, del programa Déjate Querer, emitido este 27 de agosto. Ambos lo pusieron el factor celebrity al formato televisivo introspectivo de Toñi Moreno. Allí el cantante puertorriqueño se abrió con una entrevista en la que repasaron los acontecimientos más importantes de su vida.
Fonsi habló sin tapujo alguno sobre momentos de su vida bastante duros, así como los problemas de salud mental que había experimentado. Des esta manera, el cantante confesó que estuvo a punto de abandonar la música de manera definitiva en dos ocasiones debido a estos problemas.
El primer bache lo sufrió muy pronto, a los 11 años, cuando el joven Luis Fonsi dejó atrás Puerto Rico para mudarse a Orlando (Estados Unidos) y buscarse un hueco en la música. Este cambio que vivió fue tan brusco para el cantante, que en ocasiones se replanteaba dejar todo su sueño aparcado. El puertorriqueño culpa al idioma, pues suponía una barrera que le dificultó adaptarse al país de las barras y estrellas, haciéndole dejar de cantar durante dos largos años:
"Fue un año fuerte, caí en depresión y dejé de cantar, no me sentía cómodo", relató. El joven Luis Fonsi se recuperó gracias a un proceso de adaptación a lo largo de esos dos años, consiguiendo seguir cantando. La segunda gran crisis del artista vino cuando estudiaba en el conservatorio, ya que él era diferente y no se sentía identificado con el resto de sus compañeros, de gustos más clásicos.
Tras abrir su corazón y contar públicamente sus peores momentos, el artista quiso ayudar a Amanda, una chica que pasaba por una dura etapa de su vida, pues dejó de cantar después de haberse sometido a una cirugía en la garganta. El artista habló personalmente con la chica y le dio ánimos poniendo de ejemplo su experiencia personal: "Pensé que deshacerme de la música era lo que necesitaba, pero era un momento de rabia… la música encontró su manera de regresar a mi vida de nuevo y la usé como mi escudo, como mi arma para luchar conmigo mismo".
