El campo del Real Madrid sigue siendo un campo de comodidad para el submarino amarillo. Los hombres de Álvaro Cervera no pasan por la mejor de sus épocas, teniendo solo una victoria en todo el campeonato liguero, pero el Bernabéu es un lugar donde todo cambia. Los blancos saltaron al césped mermados por las numerosas bajas en sus filas debido al Covid. Luka Modric era la principal baja en el centro del campo, junto a unos contagiados Asensio y Rodrygo que dejaron la banda derecha a Hazard, que volvía tras varios partidos a una titularidad.
Los blancos dominaron el partido de principio a final. Los merengues lanzaron constantes ataques sobre la portería del cancerbero argentino, Conan Ledesma. El argentino fue capaz de frenar en seco la delantera de un Madrid en la cual, Vinicius volvió a tener la escasa profundidad de la que se le acusaba ante equipos con un estilo muy defensivo. Benzema llegaba tocado al encuentro con algunas molestias que lleva arrastrando desde el derbi, mientras que a Eden Hazard, ni está ni se le espera realmente en el Bernabéu, pues en un partido donde debió ser el protagonista abriendo espacios volvió a estar desaparecido.
El Real Madrid acumuló continuados ataques por las bandas que, gracias al gran trabajo defensivo de los laterales cadistas, destacando la intensa y trabajada labor del Pacha Espino, el lateral izquierdo uruguayo del Cádiz que volvió a ser, junto a Ledesma, el mejor de los amarillos. Las ocasiones en la primera parte llegaban, destacando algunos disparos lejanos desde la frontal, que el meta argentino resolvió con solvencia.
En la primera parte también llegaría la jugada polémica del partido, Carlos Casemiro realizaría una entrada por detrás bastante temeraria sobre Iván Alejo, el brasileño se jugó la tarjeta roja por su entrada. El colegiado decidió perdonar la expulsión al centrocampista madridista ante la incredulidad de los amarillos que podrían haber encontrado una oportunidad con uno más sobre el verde.
Ya en la segunda parte los de Ancelotti acosaron con centros y ataques peligrosos el área de los guerreros de Álvaro Cervera que aguantaron el resultado a más no poder ante la diferencia de calidad de plantillas. Los merengues se quejaban de las continuas pérdidas de tiempo de los amarillos que dejaban correr el tiempo, viendo que podían rascar un valiosos e inesperado punto de un bastión tan complejo como es el Santiago Bernabéu.
Los centros de los merengues eran ineficientes e inútiles ante las salidas de un seguro Conan Ledesma que atrapaba por arriba todos los balones, sin dejar ninguna opción de remate a los delanteros madridistas. Finalmente el partido terminaría en tablas ante el gran trabajo defensivo y colectivo de los hombres de Álvaro Cervera, y la ineficacia ofensiva de la delantera madridista.
De esta forma el Madrid continúa como líder de la competición con 43 puntos, habiendo perdido así dos de diferencia que los separaba de un Sevilla en velocidad de crucero que está a tan solo 6 puntos con un partido menos. Por su parte, el Cádiz C.F continúa en el puesto 19 con solo 14 puntos en puestos de descenso.