Ferrari ha presentado el nuevo monoplaza que pilotarán Charles Leclerc y Carlos Sainz durante la temporada de 2021. Bautizado como SF21, el nuevo coche presenta una serie de actualizaciones técnicas respecto al del año pasado con el que la escudería italiana pretende volver a pelear por los primeros puestos en la clasificación después de un decepcionante 2020 en el que se tuvieron que conformar con terminar en el quinto puesto de la clasificación de constructores.
No obstante, el cambio más reseñable es estético y se trata del cambio de color del logo de la tabacalera Philip Morris a un verde que contrasta con el clásico rojo de los Fórmula 1 de Ferrari. En la toma lateral también se aprecia un degradado del rojo que se torna en un tono borgoña en la parte trasera del coche, en honor del 125S, el primer Ferrari en participar en la máxima competición automovilística.
En cuanto a las modificaciones técnicas, la fábrica de Maranello ha querido basar el monoplaza de este año en el de la pasada temporada debido a las limitaciones del reglamento actual, pero que han tratado de mejorar en todas sus áreas. Así lo ha explicado Enrico Cardile, responsable del departamento de chasis de la escudería: "Diseñamos una nueva caja de cambios y una nueva suspensión trasera, y junto con el esfuerzo del departamento de unidad de potencia se ha estrechado el tren trasero". Los dos objetivos principales que se proponen los italianos es "recuperar carga aerodinámica y reducir la resistencia al aire".
El conjunto motor, asignatura suspensa por Ferrari el año pasado, también ha sido renovado. Conocedores de ello son en Maranello, y por ello han ideado una nueva unidad de potencia para la temporada venidera. "Adoptamos un enfoque sistemático, con todos los departamentos (diseño, simulación, desarrollo, seguimiento) trabajando juntos para encontrar todas las oportunidades de mejora. Junto con nuestros colegas en el lado del chasis, trabajamos mucho en el diseño de la unidad de potencia, para hacer que el diseño general del automóvil sea lo más eficiente posible. Con el motor de combustión interna, nos enfocamos en aumentar su nivel de eficiencia térmica, en conjunto con nuestro socio Shell, y esto ha producido una mejora en el tiempo de vuelta que estimamos en más de una décima de segundo (combustible)", ha puntualizado Enrico Gualteri, responsable de la sección de motor del equipo.
