El mundo se encuentra en guerra, Rusia invadió a Ucrania con su ejército de la noche a la mañana y actualmente siguen luchando con cada vez más fallecidos por ambos bandos en un enfrentamiento donde los únicos que pierden son los civiles. Mientras tanto, al otro lado del mundo, en Monterrey, otra guerra entre los mismos países se celebraba sobre una pista de tenis y cuyas únicas armas eran las raquetas.
La tenista ucraniana Elina Svitolina la cual declaró que no querría enfrentarse a ninguna tenista rusa o bielorrusa sobre la pista, finalmente cedió para competir frente a la rusa Potapova, la cual se presentó sin ningún símbolo ruso en sus ropas o equipamiento. En lo que otra situación habría sido un partido normal, en esta ocasión se enfrentaban los ideales de dos países.
Y así mismo fue como se tomó el partido la tenista ucraniana Svitolina, con concentración, centrada y jugando por el honor de su país: "Estuve concentrada, en una misión por mi país". La ucraniana acabó venciendo muy sencillamente a Potapova en dos sets por 6-1 y 6-1 ante la atenta mirada del público mexicano.
Ucrania venció a Rusia, al menos en las pistas de Monterrey, en lo que suponía una justicia poética deportiva para la tenista ucraniana, la cual, sintió el peso de su país durante el partido como declaró, por ello mismo todo el dinero que recaude en el open de Monterrey lo donará a las fuerzas militares de su país: "Siento que no compito por mí misma, sino por todos mis compatriotas. Todo el dinero que gane en premios va a ser para el ejército ucraniano".
